Cada año la Secretaría de Salud del Estado de Yucatán reporta entre 95 y 120 casos de mordedura de serpiente al año, por lo que el titular de la dirección de Zoonósis de la dependencia, el Dr. Dalí Gabino Martínez Ortiz, exhortó a la ciudadanía a tomar precauciones por el aumento en la presencia de estos animales, que con el calor buscan sitios frescos que pueden ser el jardín, bajo la sombra de árboles.
El especialista comentó que es muy común la presencia de este tipo de animales en lugares que hasta hace poco eran monte o selva y que terminaron convirtiéndose en fraccionamientos o en donde se construyó vivienda, lo que ocurre mucho en municipios del interior del estado.
“Afortunadamente el número de defunciones es casi nulo ya que la gente confía en el tratamiento que se le aplica en los hospitales y acude de manera oportuna a recibir tratamiento cuando ocurre uno de estos accidentes”, subrayó el entrevistado, quien recalca que mientras más pronta sea la atención es menor el riesgo de que ocurra un desenlace fatal.
Por ello en el caso de que sea usted víctima de una mordedura de serpiente, lo primordial es asistir a la unidad médica y evitar caer en los mitos de atención como intentar succionar el veneno o aplicar un torniquete.
“Actualmente en los centros de salud y hospitales se cuentan con los antídotos de última generación que no requieren refrigeración”, subrayó.
Y aunque el pico más alto de estos reportes se da en temporada de lluvias, en estos momentos en los que las temperaturas llegan hasta 40 grados Celsius también podrían darse este tipo de situaciones, como recientemente le ocurrió a una persona en Tizimín que descargaba en una pollería ubicada en pleno centro de la ciudad, su camioneta cargada con rollos de leña y al manipular una de ellas, ocurrió la agresión de una Wol Poch, que se encontraba guardada entre la carga, y que es venenosa.
El Dr. Martínez Ortiz recomienda que, en el caso de sufrir una mordedura, la persona apunte la hora en la que ocurrió el incidente, ya que con esta información y observando si hay inflamación en la herida, el médico tratante podrá definir si se trata de una especie venenosa o no.
“Si es posible tomar una foto de la serpiente es mejor”, recalca el especialista en la materia.
Al respecto es importante señalar que en la Península de Yucatán existen 58 especies de serpientes, de las cuales solo cinco representan un riesgo para las personas, estas son la Wol Poch o Candil Yucateco, la cascabel yucateca o tzaab Kaan; la Nauyaca Real, la Nauyaca yucateca y la coralillo, cuyo veneno ataca el sistema nervioso. En el caso de las otra cuatro mencionadas, su veneno ocasiona hemorragia y necrosis.
Texto y foto: Manuel Pool
