Armando Escalante
Periodista y analista político
La prestigiada revista Etcétera publicó, el pasado miércoles seis de diciembre, un reportaje que previamente difundió por la televisión el periodista yucateco Carlos Loret de Mola, en el que se da a conocer un nuevo caso de corrupción implicando a un hijo del presidente de la república.
Este documentado caso, se tituló “El Clan” y fue realizado por Mario Gutiérrez Vega, del equipo de periodistas de investigación del señor Loret. En el se da cuenta de cómo un amigo de Andrés Manuel López Beltrán, de nombre Jorge Amílcar Olán Aparicio, recibió un contrato de la gobernadora de Quintana Roo, Mara Lezama, quien apenas llegó al cargo en junio del año pasado vía Morena.
—En los audios y documentos dados a conocer —reseña Etcétera— se observa que, en diciembre de 2022, la empresa de Amílcar Olán, Romedic, recibió un contrato del gobierno de Quintana Roo por 304 millones de pesos (mdp) para surtir medicinas y material de curación. En su mayoría ese dinero provenía del gobierno federal, pues en octubre de ese año, desde el ahora extinto Insabi se destinaron 350 mdp al gobierno quintanarroense de la recién electa, Mara Lezama.
Añade la revista del conocido periodista Marco Levario Turcot, que el 27 de diciembre funcionarios del gobierno de Quintana Roo, en unas cuantas horas, realizaron el proceso para asignar el contrato, de sólo cuatro días de duración, ignorando que esta misma empresa estaba en la lista de distribuidores irregulares de medicamentos de la Comisión de Protección Contra Riesgos Sanitarios (Cofepris).
En la investigación —prosigue—, se muestra cómo el amigo de “Andy”, como es conocido Andrés López Beltrán, dice que hablará directamente con el Secretario de Finanzas, Eugenio Segura Vázquez, el “Gino”, para evitar que una auditoría en curso vaya a darles problemas. En otras comunicaciones se escucha cómo Amílcar señala que su objetivo es llegar a 550 mdp “este año”. Además, la empresa tiene como domicilio un lote en el cual se encuentra un negocio de distinto giro, en el estado de Tabasco, la entidad natal del presidente.
El reportero Loret de Mola —explica Etcétera— narra que esto es sólo el inicio de una investigación más amplia, de varios capítulos que involucran, no sólo a los hijos del presidente, sino a funcionarios del gobierno federal y hasta mandos del ejército mexicano.
Según el reportaje que vimos en la televisión, Amílcar Olán platica por teléfono sobre estos negocios y luego todo sucede en la realidad. En una nota de El Informador que dio también la noticia, se explica que el íntimo amigo de Andy López Beltrán, hijo del presidente, tiene a los astros del obradorato alineados.
—Le resuelven una licitación en unas cuantas horas. Le dan 300 millones en tan sólo cuatro días. La empresa que usa para beneficiarse de la venta de medicamentos tiene la dirección donde está una tienda de azulejos… en Tabasco. Le pagan por adelantado. Y no lo andan molestando con los “entregables”: que no le den lata las auditorías, que no le vengan con que debe una aspirina o una venda.
—Así opera la corrupción en el Gobierno de López Obrador. El sitio Latinus tuvo acceso a 40 horas de grabaciones telefónicas y decenas de documentos que radiografían los alcances de la corrupción en el actual sexenio y cómo los hijos del presidente y sus amigos tienen metidas las manos en todo: Dos Bocas, el Tren Maya, el sector salud, los estados que gobierna Morena.
El xix.— De no ser tan pero tan ignorantes, los fanáticos del “Peje” que realmente crean en el combate a la corrupción, le deberían exigir cuentas a este presidente para ver si a ellos si les hace caso y deja de mentir.