México se ubica entre los 10 primeros lugares donde se registran menos nacimientos; de acuerdo a la Coespo, Yucatán se ubica en el puesto 21. Uno de los factores se debe a que los países implementan estrategias de reducción de natalidad y ahora los jóvenes priorizan estudiar
Durante los últimos años, la tendencia por formar una familia con hijos ha ido a la baja. Aunque existen diversas razones por las que esto ocurre, la incidencia en este modelo de vida ha llevado a México a posicionarse entre los 10 países que menos nacimientos registró desde la mitad del siglo pasado y hasta el 2021, mientras que Yucatán ocupa el puesto 21 en nacimientos, es decir, hay 20 estados que tienen más nacimientos por cada mil mujeres en el país.
De acuerdo al director del Consejo Estatal de Población (Coespo), Tonatiuh Villanueva Caltempa, según el Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (Inegi), en México hay aproximadamente 18 nacimientos por cada mil mujeres, donde en Yucatán hay aproximadamente 20 nacimientos por cada mil mujeres.
“Se puede afirmar que Yucatán está presentando un nivel apenas mayor que el del total del país, por lo que van hasta cierto punto igual”, señaló.
Según la World of Statistics, organización civil conformada por expertos en estadística que buscan generar datos reales sobre diversos temas, la natalidad alrededor del mundo en el cambio de siglo ha ido decreciendo con el paso de los años.
Dentro de sus estudios encontraron que no solo países de primer mundo en Europa o Norteamérica han sido víctimas de este fenómeno, sino que incluso en Latinoamérica hay registros reales de que la gente ya piensa un poco más en traer más bebés al mundo.
Una advertencia global de la Federación Internacional de Sociedades de Fertilidad (IFFS) señaló que un 93% de los países, incluidos el Reino Unido y Estados Unidos, podrían enfrentar una crisis de ‘subpoblación’ para finales del siglo XXI. Según el informe, la tasa de fertilidad global está disminuyendo, con implicaciones significativas para las economías y sistemas sociales si la tendencia continúa.
Según los autores del informe, esta predicción se debe a que “muchas políticas se basaban en el objetivo de reducir el crecimiento poblacional debido a la preocupación de que la superpoblación provocaría hacinamiento, malas condiciones sanitarias, epidemias, hambrunas, guerras, migraciones masivas, aumento de las desigualdades humanas y daños medioambientales que provocarían el apocalipsis humano”, citó el diario británico Daily Mail.
El estudio, publicado en la revista Human Reproduction Update, indicó que la mayoría de las naciones no alcanzarán la tasa de fertilidad de reemplazo de 2.1 hijos por mujer. Este fenómeno dejará a los países con un número insuficiente de jóvenes para sostener la fuerza laboral y los servicios públicos, intensificando el envejecimiento poblacional.
El funcionario estatal detalló que la información más actualizada de este tema es del 2021 proveniente del Banco Mundial, los territorios con menos nacimientos son: Andorra, Mónaco e Islas Marianas del Norte.
Sin embargo, estos son territorios muy pequeños que apenas y tienen nacimientos. En un rango más normalizado, los países con menos nacimientos son: China, Corea del Sur, Puerto Rico, San Marino, Japón e Italia. “Con menos de siete nacimientos por cada mil mujeres”, agregó.
Respecto a Yucatán, explicó que los municipios que registran menos nacimientos en Yucatán son: Tetiz, Tunkás, Dzilam González, Dzoncauich, Tixkokob, Dzitás, Telchac Pueblo y Tahmek, con menos de 14 nacimientos por cada mil mujeres.
Expresó que la tendencia es a la baja, pero en algunas colonias de Mérida y algunos municipios todavía hay gente que suelen tener varios hijos, está el caso de Tahdziú, el cual en 2021 tuvo más de 50 nacimientos por cada mil mujeres.
Este municipio hace unos años fue considerado no sólo de los más pobres de México sino de América Latina. Incluso el actual candidato común a la gubernatura del Estado por los partidos Acción Nacional (PAN), Revolucionario Institucional (PRI) y Nueva Alianza (Panal), Renán Barrera Concha, ahí empezó su campaña.
Sobre si los factores se deben a la reducción de natalidad, refirió que entre las explicaciones sobre la disminución de la natalidad se ha puesto de relieve la influencia de la escolaridad, anteriormente las mujeres tenían menos oportunidades para estudiar por lo que se quedaban a atender la casa y eran más propensas a tener hijos.
“Hoy en día al existir más oportunidades para las mujeres, estas tienen la oportunidad de decidir y hoy en día se decide tener menos hijos para seguir estudiando”, dijo.
La maternidad ha dejado de ser algo prioritario en el plan de vida y desarrollo de las mujeres jóvenes en México. A decir de la Encuesta Nacional de la Dinámica Demográfica, la renuencia femenina a procrear aumentó de 18.3% en 2014, a 24.2% en 2018, tendencia que continúa al alza.
Un estudio de la Universidad Nacional Autónoma de México (Unam) explicó que esta tendencia se debe a que ahora las mujeres tienen mayores oportunidades profesionales, laborales y educativas, así como mayor libertad sexual, y ello deriva en un mayor conocimiento y uso de los métodos anticonceptivos. En opinión de la especialista, la tendencia a postergar la maternidad irá en aumento, e incluso habrá quienes se sientan más libres de elegir no reproducirse, por no considerarlo esencial.
Villanueva Caltempa expresó que también la globalización está más presente y los jóvenes al tener más acceso a la información permite que estos tomen decisiones más completas y conozcan más, por lo que prefieren enfocarse en ellos mismos antes de tener hijos.
De igual modo, indicó que dado el calentamiento global muchos jóvenes prefieren no tener hijos para que no tengan que sufrir las consecuencias que se empiezan a notar derivadas de esta problemática.
La reducción de nacimientos en un futuro podría causar problemas económicos, ya que las nuevas generaciones mantienen a los adultos mayores, esto es, serían menos los jóvenes y más los “abuelos” pensionados. Países como Francia, España, Noruega y Finlandia, entre otros apoyan económicamente a las familias por tener hijos.
Interrogado que si ha aumentado la infertilidad, dijo que al contrario, la infertilidad se ha mantenido igual o hasta disminuido considerando que hoy en día la medicina ha tenido grandes avances y es posible la fecundación in vitro, en la cual, aun cuando una parte de la pareja sea infértil, es posible el embarazo.
Para finalizar señaló que hoy en día hay más información disponible y desde Coespo se encargan en distribuirla a jóvenes y adolescentes de todo el estado, esto es importante para que se tomen decisiones responsables y sobre todo informadas que permitan a los jóvenes decidir sobre su futuro.
Texto y fotos: Darwin Ail