Llegó la fecha más esperada para miles de católicos yucatecos, que desde meses atrás prepararon su viaje a la Basílica de Guadalupe en la Ciudad de México donde el pasado viernes 12 de julio, una vez más, se celebró la misa de los yucatecos.
De acuerdo al maestro Ángel Gutiérrez Romero, la peregrinación anual al Tepeyac de la Arquidiócesis de Yucatán es una tradición comenzada por el arzobispo don Martín Tritschler y Córdova en 1935.
El secretario general de la Amotac Yucatán, Javier Poot Alonzo, informó que desde el miércoles comenzaron a salir desde diversos puntos del estado y también de la Península (ya que hay yucatecos que radican en Quintana Roo y Campeche), más de 200 autobuses; las autoridades eclesiásticas reportaron que fueron 56 grupos de peregrinos los que viajaron, y a los que se sumaron yucatecos residentes en la Ciudad de México.
En esta magna celebración, rumbo a la Basílica y durante la procesión que inició en un punto cercano, no faltó la música de charanga y hasta el baile de la cabeza de cochino en honor a la Patrona de México.
La misa, a la que se calcula acudieron más de cinco mil yucatecos, inició a las 10 de la mañana y fue oficiada por el arzobispo de Yucatán, monseñor Gustavo Rodríguez Vega, a quien acompañaron los obispos auxiliares Pedro Mena Díaz, Mario Medina Balam, además de Monseñor Víctor Carabez Chávez.
“Él estuvo en Mérida como parte de la Congregación de los Misioneros de la Natividad de María, quien fue consagrado como obispo de la diócesis de Tenancingo, ayer sábado 13 de julio”, detalló el padre Jorge Martínez Ruz, responsable de comunicación de la arquidiócesis yucateca.
Después de saludar en lengua maya, Mons. Medina Balam hizo una reflexión sobre lo importante que es tener la cercanía y protección de María, la madre de Dios y también nuestra, en su advocación de la Virgen de Guadalupe, recordando que en el 2031 se cumplirán 500 años de sus apariciones en el Tepeyac.
En la misa en la que las lecturas y oraciones hicieron alusión a la Virgen de Guadalupe, a quien se le agradeció que no ocurriera nada malo tras el paso de “Beryl”, participó el coro de la Dimensión de Música Sacra de la Arquidiócesis de Yucatán.
Al finalizar la misa, en el atrio se llevó a cabo una convivencia con cantos y bailes y, posteriormente, los peregrinos, ya en plan de paseo, se trasladaron a diversos puntos de la ciudad e inclusive continuaron su recorrido hacia otras ciudades como Guadalajara, Guanajuato, Puerto Vallarta, Veracruz y Oaxaca.
Importante es señalar que a partir de esta peregrinación anual, el 12 de julio ya es considerado de manera general como el Día del Yucateco, y en esta ocasión como parte del evento internacional “Memoria Luminosa”, se ha construido una réplica de Chichén Itzá en el Zócalo de la Ciudad de México.
Esta imponente estructura de 15 metros de altura será el escenario principal para el videomapping “El Pueblo Maya y Felipe Carrillo Puerto: Memoria Luminosa II”.
Este espectáculo multimedia que combina audio, video y danza en vivo estará disponible para el público del 12 al 21 de julio, con proyecciones gratuitas a las 8:00, 8:45 y 9:30 de la noche.
Datos a destacar
– A partir de esta peregrinación anual, el 12 de julio ya es considerado de manera general como el Día del Yucateco, y en esta ocasión como parte del evento internacional “Memoria Luminosa”, se ha construido una réplica de Chichén Itzá en el Zócalo de la Ciudad de México.
– Mons. Medina Balam hizo una reflexión sobre lo importante que es tener la cercanía y protección de María, la madre de Dios y también nuestra, en su advocación de la Virgen de Guadalupe, recordando que en el 2031 se cumplirán 500 años de sus apariciones en el Tepeyac.
– En esta magna celebración, rumbo a la Basílica y durante la procesión que inició en un punto cercano, no faltó la música de charanga y hasta el baile de la cabeza de cochino en honor a la Patrona de México.
Texto y fotos: Manuel Pool
