El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, lamentó la caída de un avión con 62 personas en el interior de São Paulo y pidió un minuto de silencio por las víctimas.
El mandatario brasileño se enteró del accidente en momentos en que se disponía a dar un discurso en un evento en el municipio de Itajai, en el estado de Santa Catarina, e interrumpió el acto para lamentar el hecho.
“Tengo que ser portador de una noticia muy mala y quiero pedir a todos que se pongan de pie para hacer un minuto de silencio porque acaba de caer un avión en la ciudad de Vinhedo, en São Paulo, con 58 pasajeros y 4 tripulantes y parece que todos murieron”, dijo Lula a los asistentes.
El video con el pronunciamiento fue publicado por el mandatario en redes sociales, en las que el presidente ofreció además toda la solidaridad a los familiares y amigos de las víctimas. El avión, un bimotor de modelo ATR-72-500 de la aerolínea Voepass que hacía el trayecto entre la ciudad de Cascavel y São Paulo, se estrelló en una zona residencial en el municipio de Vinhedo.
Según la aerolínea, hasta el momento se desconoce cómo ocurrió el accidente y cuál es la situación actual de los pasajeros.
Siete equipos de bomberos fueron movilizados para atender el accidente, según el Cuerpo de Bomberos local, que tampoco aclaró si había víctimas.
Videos publicados en redes sociales muestran a la aeronave dando vueltas sobre sí misma antes de desplomarse en medio de un gran estruendo y muy cerca de algunas casas.
En otra noticia, el Gobierno de Haití informó de que ha dado instrucciones a las fuerzas del orden para “tomar todas las medidas necesarias” a fin de garantizar la paz pública, ante el recrudecimiento de la violencia de las bandas armadas en varias zonas del país.
En un comunicado, el Ministerio de Justicia y Seguridad Pública indicó que la finalidad de ello es “poner fin a esta situación de terror, que dura ya demasiado tiempo”.
“El objetivo es garantizar la paz pública para que la población pueda circular libremente, con toda tranquilidad, y volver a la vida normal”, prosiguió la nota, firmada por el titular de esa cartera, Carlos Hercule.
Las autoridades haitianas reaccionan así ante actos como el incendio de la aduana de Ganthier, las acciones contra un vehículo blindado de la Policía Nacional Haitiana (PNH) o el ataque al Instituto Monfort de Croix-des-Bouquets, dedicado a la atención de niños sordomudos y sordociegos.
El recrudecimiento de la violencia ha causado víctimas entre la población, en especial en Cabaret y Arcahaie, en el departamento del Oeste, donde se encuentra la capital. “Los actos criminales de los últimos días también han provocado el desplazamiento de numerosas familias, agravando la crisis humanitaria en el país”.
Texto y foto: EFE