En la primera quincena de agosto de 2024, la tasa de inflación en México fue de 5.16%; el poder adquisitivo de los trabajadores se ha desplomado, mientras que los precios de han disparado “brutalmente”, lo que genera en los trabajadores estrés económico, situación que se refleja en la productividad y también en su salud.
Al iniciar el año se otorgó un aumento salarial decoroso, pero ya no alcanza, dijo el secretario general de la CROC en Yucatán, Pedro Oxté Conrado, quien recalcó que con el salario de hoy no es posible adquirir los mismos productos básicos que en el primer trimestre de este 2024.
“Las amas de casa viven todos los días un calvario para hacer rendir la comida, ya que la canasta básica tiene un alto costo, de modo que se las tienen que ingeniar para adquirir productos de menor calidad pero más baratos”, comentó el líder sindical, quien comentó que hoy un kilo de tortillas cuesta 24 pesos, mientras que los precios de los productos perecederos debido a la sequía que afectó buena parte del país, registraron importantes incrementos.
“Hoy la familia del trabajador, no puede comer con un salario mínimo de 247 pesos, ya que también se debe de proveer recursos para vestido y transporte, y ahora en el regreso a clases destinar recursos para la adquisición de uniformes y útiles escolares”, dijo.
Es por esta razón que al trabajador no le queda más opción que buscar hacer horas extras o un medio turno adicional, o buscar un segundo empleo, lo que termina afectando su salud y mermando la calidad de vida de toda la familia.
“Se trata de una situación injusta porque los trabajadores son los que generan riqueza pero son los que menos la disfrutan”, subrayó Oxté Conrado, quien considera que se requiere dar una compensación de un 10 o 15 por ciento adicional al salario.
Ante este panorama, el líder reconoció a las empresas que se han solidarizado con los trabajadores para entregarles paquetes de mochilas con útiles escolares, y también hizo un llamado para que las autoridad la que corresponda vigile que en el comercio no se reetiqueten los productos, y, en este sentido, incluso consideró que los precios se deben mantener sin cambios durante los 12 meses que está vigente el nuevo salario.
Texto y foto: Manuel Pool
