Editorial de Peninsular Punto Medio

Para que no nos asustemos, las relaciones con los gobiernos de Estados Unidos y Canadá continúan, aclaró el presidente Andrés Manuel López Obrador, tras anunciar que la suspensión del trato es entre el Gobierno de México y las embajadas de esos dos países, debido a las declaraciones injerencistas de los embajadores en el país, Ken Salazar y Graeme C. Clark sobre la iniciativa de reforma constitucional al Poder Judicial.

“La relación con los gobiernos continúa, con Canadá y con Estados Unidos, es nada más con las embajadas y en especial, con el embajador de Canadá y de Estados Unidos porque no les corresponde opinar sobre asuntos que sólo competen a los mexicanos. Es un asunto de respeto a nuestro país. Además, imagínense lo que dice el embajador de Estados Unidos, que si se elige a los jueces —palabras más, palabras menos— se afecta a la democracia. ¿Cómo es eso? ¿Cómo se afecta a la democracia?”, expuso en su conferencia mañanera de ayer jueves.

“¿Por qué intervienen tanto en este asunto que corresponde a los mexicanos? No encuentro yo una explicación lógica, aunque a veces lo que no suena lógico, suena metálico”, indicó.

En conferencia de prensa matutina detalló que la presidenta electa, Claudia Sheinbaum Pardo, coincide en la necesidad de la reforma constitucional al Poder Judicial a fin de limpiarlo de corrupción.

Al respecto, indicó que el proceso de revisión y discusión de la iniciativa en el Congreso de la Unión se está llevando a cabo de acuerdo con los tiempos estipulados en un ambiente económico sólido, contrario a lo planteado por el bloque conservador.

“Sí es importante el que se den los cambios en el Poder Judicial y que nadie tampoco exagere, la economía está muy fuerte”, recalcó.