La victoria de Donald Trump en las elecciones estadounidenses ha encendido alarmas en América Latina, una región que anticipa cambios drásticos en las relaciones bilaterales, el comercio, la política migratoria y la seguridad.
Países como México, Brasil, Argentina, Venezuela, Cuba, Colombia y El Salvador se preparan para afrontar posibles repercusiones económicas y políticas que podrían reconfigurar su vínculo con Washington y modificar el panorama regional.
El triunfo de Trump ha sido recibido con optimismo cauteloso en México, donde empresarios y analistas ven oportunidades para fortalecer la relación económica. La presidenta Claudia Sheinbaum expresó su confianza en mantener una relación respetuosa y de cooperación con EE.UU.
Pocas horas después de que se confirmara el triunfo de Trump, presidentes, expresidentes y líderes latinoamericanos le ofrecieron su apoyo para fortalecer los lazos políticos y comerciales de la región con el país norteamericano.
Uno de los primeros en felicitarlo fue el presidente argentino, Javier Milei, quien a través la red social X le dijo: “puede contar con Argentina para llevar a cabo su tarea”. El gobernante ultraliberal exaltó la “formidable victoria electoral” del republicano y añadió: “Ahora, Haga América Grande Otra Vez”.
Trump, el colega republicano de Milei
Además, Milei ha anunciado que viajará la próxima semana a Estados Unidos para reunirse con su “colega republicano”. La victoria de Trump prácticamente ha coincidido con la destitución de la ministra de Relaciones Exteriores argentina, Diana Mondino, tras su decisión de votar a favor en la ONU de levantar las sanciones a Cuba. Este hecho evidencia cuál es la visión internacional de Milei, quien considera prioritarios a Estados Unidos e Israel, “según dijo el propio mandatario”. Milei nombró en el cargo a Gerardo Werthein, empresario millonario y judío sin experiencia diplomática.
Maduro confía en una relación ganar-ganar
En Venezuela, Nicolás Maduro, que consideró a Trump su peor enemigo durante su primera presidencia (2017-2021), ve la vuelta al poder del republicano como “un nuevo comienzo” para una relación ganar-ganar, entre Caracas y Washington, que no mantienen vínculos bilaterales oficiales desde 2019.
Trump impuso más de un centenar de sanciones a Venezuela y ve como un error el alivio de estas restricciones por parte del Gobierno de Joe Biden, pero no está claro cuál será su posición ahora en relación con Venezuela, país que puede satisfacer las necesidades energéticas de EE.UU., especialmente en un contexto adverso por las guerras en Ucrania y Oriente Medio.
Cuba teme una nueva vuelta de tuerca
Cuba teme que un segundo mandato de Trump en la Casa Blanca suponga una nueva vuelta de tuerca en el régimen de sanciones de Washington contra la isla.
Texto y foto: EFE