Carlos Pérez
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Cuando pensamos en instituciones universitarias, tenemos presente la formación de futuros profesionales, pero tenemos algo importante que producen las universidades y muchas ocasiones se nos olvida y es el conocimiento, la única manera de generarlo es mediante la investigación, situación de la que las empresas pueden sacar provecho y estar atentos de lo que se está gestando en términos de investigación y como organizaciones implementarlo.
Los centros de educación superior son clave en la innovación y el desarrollo del conocimiento, por lo que sus investigaciones pueden ser valiosas para las empresas que buscan mejorar sus productos o servicios, solo imaginemos una investigación conjunta entre el sector privado y las universidades donde se puedan incluir la financiación de proyectos de investigación, la generación de nuevas tecnologías, procesos y productos para que con la obtención de resultados puedan ser aplicados en algún sector.
Las organizaciones pueden desempeñar un papel fundamental en la promoción de la investigación en las universidades al proporcionar como ya se mencionó financiación, recursos tecnológicos y expertise especializado. Si logramos establecer alianzas estratégicas, las empresas pueden colaborar en proyectos de investigación que beneficien tanto al ámbito académico como al sector industrial y comercial; por medio de proporcionar becas, patrocinios o la creación de fondos, las empresas pueden impulsar la investigación, originando con ello la innovación y el desarrollo de nuevos productos o soluciones. Además, al compartir conocimientos y experiencias las empresas contribuyen a que los académicos tengan acceso a información actualizada, lo que permite mejores investigaciones universitarias.
Debemos comprender que todas las investigaciones realizadas en las universidades son una fuente de innovación y conocimiento para las empresas, contribuyendo de manera puntual a su crecimiento. Los avances científicos generados en el espacio académico pueden ser aplicados de manera directa e inmediata en el desarrollo de nuevos productos, procesos y soluciones que mejoren la competitividad de las empresas y así darle un valor que permita un crecimiento tripartito entre empresa, investigación universitaria y la sociedad.
Es importante mencionar que si la iniciativa privada colabora con investigadores académicos, las empresas mejoraran su capacidad de adaptación a los cambios del entorno con enfoques más innovadores, fortaleciendo su posición en la industria y creando una reputación más sólida, por eso hoy te pregunto ¿estás desde tu empresa apoyando la investigación universitaria?
