Campeche es de las dos entidades más seguras del país junto a Yucatán, reconocido por medios de los Estados Unidos, y eso es gracias a sus policías, destacó la gobernadora Layda Sansores San Román al presidir junto a la titular de la Secretaría de Protección y Seguridad Ciudadana (Spsc), Marcela Muñoz Martínez, la ceremonia de entrega al Mérito Policial, que fue otorgado al subinspector Juan Manuel Tacú Maldonado, en el marco del Día del Policía.
Acompañadas de todos los integrantes de la mesa para la construcción de la paz y la seguridad, agradeció su labor diaria haciendo operativos apoyados por todos ustedes, porque “queremos un estado en paz, lo que es reconocido por los Estados Unidos que se pasan de exigentes y dicen que solo a dos recomiendan sin necesidad de tomar precaución extraordinaria, y se debe a ustedes, a su trabajo, entrega, pasión y compromiso”.
Ante cientos de policías congregados en el Centro de Convenciones y Exposiciones Campeche XXI, la mandataria reconoció que este fue un año muy complicado. “Ser policía es complicado y este año fue más complicado todavía. Aquí se puso a prueba lo que es la lealtad, la esencia de cada policía. El saber que no vasta tener un uniforme para llamarse policía. El verdadero uniforme, la piel del deber que llevan puesta siempre. Es esta esencia del honor, de la lealtad a los principios y la institución”, mencionó.
Sansores rememoró su gran afecto por los policías desde su lucha en el 97. “Coincidimos en la fecha con Tacú, él empieza su carrera en ese año y lleva 27 años, igual llevamos 27 años en este andar, caminando en el peligro como lo hacen ustedes, en el filo de la navaja muchas veces. Me da mucho gusto y cuando los veía en los caminos viéndolos con esa humildad, pero con esa entereza, tuve la oportunidad de ir haciendo algo más por ustedes, que no es suficiente y tendremos que hacer más porque más merecen”, mencionó la mandataria.
Entre ovaciones ponderó que tendrán las oficinas más bonitas de todo Campeche, la que aspiraría cualquier funcionario, ya que se hará una inversión importante, por eso no se pudieron pasarse de la noche a la mañana, porque desgraciadamente aquí se hacen edificios muy modernos, pero poco funcionales, entonces “estamos rehaciendo muchas cosas, pero van a llegar con toda la dignidad que ustedes merecen, ya no los cuchitriles que tenían antes”.
Indicó que los van a envidiar, ya que vino el cónsul de los Estados Unidos, y cree que esas oficinas no las tiene ni Obama, así que los felicitó porque se lo han ganado, no fue gratuito, sino una decisión tomada después de ese valor y el deber que ustedes sobrepusieron sobre intereses, y a lo mejor intereses personales.
Agradeció su entrega y dijo creer en ellos, pues a veces la sociedad no valora lo que es un policía. Se enojan porque los estamos cuidando, porque ponerles la prueba del alcoholímetro es ver por ellos; a veces les molestan las multas, pero no hay otra manera de cuidar su integridad porque la sociedad no siempre entiende.
“Es una tarea que nosotros seguiremos haciendo para hacer conciencia en nuestros ciudadanos cuánto vale un policía, cuánto se le debe, son mis héroes de todos los días, no se ganan un pedestal nada más porque lograron detener a un peligroso delincuente, eso vale, pero creo que los héroes se construyen a diario y ustedes eso hacen con su infinita paciencia, bajo el sol, con su resistencia y dedicación, así se están construyendo los nuevos héroes de este Campeche”, dijo.
Mérito policial
En esta edición, el Mérito Policial se entregó al subinspector Juan Manuel Tacú Maldonado, por su trayectoria y compromiso con la seguridad ciudadana durante 27 años. Director operativo de Hopelchén lo fue también de Tenabo, Hecelchakán, Calakmul, Carmen y Campeche. Ha tomado diversos cursos en derechos humanos, a fin de mejorar su operatividad como primer respondiente, en trata de personas, policía de proximidad, entre otros.
Se exhibió un emotivo video en donde su esposa, Guadalupe, y sus hijos Yesenia y Luis, le reconocer su labor y el estar siempre pendientes de ellos pese a lo arduo y demandante de su labor; y en su honor la Banda de Guerra de la institución realizó el tradicional “toque del tres Diana”. Se dijo feliz de su trabajo al que ha puesto todo su esfuerzo, empeño, dedicación y parte de su vida, “y puedo destacar hoy que ésta es mi vocación”.
A las nuevas generaciones les recordó que ser policía no es fácil, es complicado y difícil, “tenemos que desarrollar el sentido de responsabilidad y de proteger y servir a la gente, portar el uniforme con mucha honradez y confianza. Nuestra misión es cumplir con la tarea que nos encomienda el Estado, responder a la ciudadanía, la paz y tranquilidad en la entidad depende de nosotros.
