En el marco del aniversario 80 de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), jóvenes de seis estados presentaron en el Bosque de Chapultepec el proyecto Hip Hop por la Paz, una iniciativa que utiliza el arte y la cultura urbana como herramientas para prevenir la violencia y las adicciones, y construir comunidad.
El evento fue encabezado por Eunice Rendón y Héctor Macías, coordinadores nacionales de la iniciativa, junto con el colectivo Bendito Estilo y Red VIRAL, en colaboración con la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC), la Comisión Nacional contra las Adicciones (Conasama), los Centros de Integración Juvenil (CIJ) y la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (Sspc).
Durante más de una hora, seis grupos integrados por jóvenes de entre 8 y 13 integrantes subieron al escenario para compartir letras sobre resiliencia, reconciliación y esperanza.
De San Luis Potosí se escuchó un mensaje claro: “No al crimen, no al odio, yo digo que no. Levanto mi voz por la paz y te doy mi razón”.
Desde el Estado de México, un llamado directo a invertir en educación y arte: “Más escuelas, menos cárceles, más espacios para el arte. Todos buscamos lo mismo y eso es la seguridad”.
El grupo de Morelos apostó por la transformación interior: “Cambia el ‘te odio’ por ‘te amo’, nadie es tu enemigo, más todos son tus hermanos”.
En Querétaro, la juventud rimó sobre libros, respeto y conciencia social: “Que mi morro cargue un libro y no un fierro en la cintura. Esta cultura mi corazón enriquece; donde hay respeto la paz florece”.
Guerrero, con su fuerza lírica, llevó al público a la reflexión sobre la realidad en los territorios más golpeados: “Aquí la vida no es como la cuentan. Un paraíso que ha cobrado muchas cuentas… Soy guerrera del jaguar, pues guerrero es mi tierra, donde nacen luchadores y nunca bajan bandera”.
Durante la presentación, José María Izábal, asesor especial de la Unodc, destacó la importancia de promover herramientas creativas como la música y el arte en la prevención de adicciones y conductas de riesgo, al señalar que “estos proyectos fortalecen los factores de protección, el trabajo en equipo y la autoestima de las y los jóvenes”.
La iniciativa ha recibido más de 300 canciones en la vertiente comunitaria y 250 en la vertiente penitenciaria, con participación de jóvenes de todo el país.
Texto y foto: EFE / Agencias
