Las altas concentraciones de magnesio y calcio en el agua de la Península de Yucatán la hacen ideal para consumo humano, debido a que los minerales son esenciales para prevenir enfermedades óseas y cardiovasculares; sin embargo, las campañas publicitarias de las grandes compañías embotelladoras han persuadido a gran parte de la población para encumbrar un negocio millonario y menospreciar el consumo de agua potable, afirmó el ingeniero Jorge López González, durante su conferencia “El agua que tomamos”.
Afirmó que el agua de Yucatán es considerada “dura” por su alta concentración de minerales, consecuencia de la disolución de las rocas calizas cuando el líquido se filtra al subsuelo.
Ejemplificó que el calcio es la base para la formación y crecimiento de huesos y cartílagos, además el magnesio es un preventivo natural para enfermedades cardiovasculares, “estudios internacionales han demostrado que el 80% de las personas que consumen agua con calcio tienen menor índice de este padecimientos del corazón”, agregó.
Indicó que la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda que el agua para consumo humano contenga 100 miligramos de calcio y 30 miligramos de magnesio y el recurso hídrico de Yucatán tiene incluso más valores de los recomendados, por lo que se le considera “una de las mejores aguas del mundo”.
Comentó que a partir de brotes de cólera a nivel mundial y a intensas campañas publicitarias de grandes empresas embotelladoras se ha persuadido a la población de tomar únicamente agua de garrafón, “para los meridanos de los años 80 era común tomar agua de la llave, el agua potable es apta para consumo humano”, afirmó.
Dijo que México está entre los tres primeros lugares en consumo a nivel mundial de agua embotellada, y se estima que cada familia consume al año 90 garrafones en promedio, lo que representa un negocio de más de 11 mil millones de pesos. Además, dijo, el agua embotellada está totalmente desmineralizada, por lo que hidrata, pero no aporta minerales necesarios para el organismo.
Sostuvo que muchas personas tienen temor de beber agua del grifo, pero aclaró que el agua potable es apta para el consumo humano, siempre y cuando los tinacos de almacenamiento permanezcan limpios, “el problema es que cuando llega a las casas, el agua entra al tinaco y a la cisterna, que son dos focos de contaminación porque nadie los lava”, refirió, Dijo que además de tener los contenedores de agua limpios, se puede hervir o congelar el agua potable para tener aún más confianza de consumirla, debido a que a temperaturas extremas se eliminan las bacterias. Asimismo, sugirió a la población combinar el agua potable con el agua de garrafón para obtener los valiosos minerales que el agua de la Península aporta al cuerpo humano.
“No se trata de cambiar totalmente los hábitos, pero sí de mejorarlos. No estamos tomando agua con los minerales que el cuerpo necesita”, concluyó.
– José Villegas
