La Dra. Leticia Paredes Guerrero explica que la violencia digital de género está dirigida a las mujeres no solo por el hecho de ser mujeres, sino porque se considera que las mujeres deben de cumplir un estereotipo o un rol, y que son vistas como propiedad de los hombres o simplemente como un objeto; también son afectadas por fotografías, mensajes y comentarios, especialmente a través de redes sociales
De acuerdo con un estudio realizado en instituciones universitarias de los estados de Oaxaca, Veracruz y Yucatán, existe una alta prevalencia de violencia de género digital, que incluye aspectos como el acoso realizado de esta manera y que ocupa el primer lugar.
Al respecto, la responsable del Programa Institucional de Igualdad de Género de la Universidad Autónoma de Yucatán (Uady), la Dra. Leticia Paredes Guerrero, explica que la violencia digital de género está dirigida a las mujeres no solo por el hecho de ser mujeres, sino porque se considera que las mujeres deben de cumplir un estereotipo o un rol, y que son vistas como propiedad de los hombres o simplemente como un objeto.
Entrevistada en el marco de la inauguración del VI Congreso Nacional de Género, “Construyendo una sociedad en igualdad”, que este martes inició en el campus de Ciencias Sociales y Humanidades de la Universidad Autónoma de Yucatán, la Dra. Paredes comentó que será en este espacio donde se presentarán los resultados de este estudio en una mesa de trabajo a realizarse hoy miércoles.
“Observamos que, a diferencia de los hombres que utilizan más la tecnología y que se pueden defender mejor de los ciberataques de los que pudieran ser objeto, las mujeres todavía tienen poco conocimiento en torno a la tecnología y a aquellas acciones que podrían prevenir la violencia digital”, explicó.
Entre los mensajes que manda gente de identidad desconocida, se incluyen fotografías, mensajes y comentarios de odio, principalmente contra integrantes de la comunidad sexogenérica, pero también está presente la pornografía sin consentimiento, que tiene detrás el objetivo de hacer daño por venganza.
“El acecho dentro del acoso digital es la conducta no deseada más recurrente y es como estar estoqueando o mirando” dijo la entrevistada. Al respecto, es importante señalar que en el argot digital “stockear” o ser “estockeado” se refiere a cuando alguien está obsesionado o fijado en una persona, generalmente en las redes sociales o en línea.
Esto puede incluir revisar constantemente el perfil de la persona; leer y re-leer sus publicaciones y comentarios; buscar información sobre la persona en línea, así como enviar mensajes o comentarios frecuentes, lo que puede ser considerado como una forma de comportamiento inapropiado o invasivo, especialmente si la persona objeto de la obsesión no ha dado su consentimiento para ser contactada o seguida.
En torno a la legislación que existe en el materia y su actualizacion, la Dra. Paredes consideró que más que hablar de prohibiciones hay que hablar de una educación digital, en donde se destaque el respeto a la privacidad, el respeto a los datos y a la información que las personas se quieran mandar, siempre y cuando no dañen un tercero.
“Hace falta mucha educación digital y tener en cuenta que las redes digitales pueden ser una gran herramienta pero también pueden ser un gran destructor, porque vemos que por estos medios se puede juzgar, sentenciar y exhibir situaciones que no se han investigado, además de que tenemos que generar una conciencia o una educación digital, pero también hay que estar trabajando también en poner todos aquellos candados tecnológicos para que mis datos privados personales no sean robados y utilizados por otras personas”, subrayó.
En este sentido, consideró que la legislación no va a lograr su cometido si no va acompañada de una política institucional y pública que nos lleve a conocer como utilizar la tecnología.
“Tenemos que abordar este tema desde el punto de vista social y ubicarlo dentro de los planteamientos de género que está detrás de todo esto, porque cuando hay un comportamiento de este tipo podemos encontrar misoginia, sexismo, que es la devaluación de un sexo hacia otro, pero también encontramos el tema de odio hacia la diversidad y esta práctica cotidiana de transmitir sin la autorización la fotografía de una mujer pensando que son ellas propiedad de alguien, o que no tienen un valor o que son un objeto”, recalcó la entrevistada, quien se pronunció a seguir haciendo esfuerzos para que exista conciencia respecto a esta problemática y hacer un planteamiento integral para su solución.
“Debemos seguir trabajando para que estos prejuicios, estereotipos y roles de género vayan desapareciendo y que no se utilicen para ejercer violencia contra un tercero”, apuntó.
Para abordar estos temas con otros niveles educativos, la Dra Paredes recordó que el año pasado en la Filey se hizo un taller con las escuelas secundarias en las que se trabajaron de manera lúdica con juegos como el memorama para enseñar a los alumnos los diversos tipos de violencia digital que existen.
“Junto con un manual se va aprendiendo cuáles son estos tipos de conducta y qué hacer en su momento, esa fue la primera acción que hicimos, pero además, con toda la información que recapitulamos, rearmamos el famoso violentómetro para pedirle a la gente que señale qué tipo de violencia digital han vivido y a partir de ello generar reflexión”, detalló.
También comentó que a partir de este proyecto se generaron materiales didácticos que se presentaron en la Filey, y que deben ser socializados trabajando en coordinación con profesores y profesoras, que conozcan sobre este tipo de violencia y la manera de afrontarla, para lo cual se buscará trabajar de la mano con la Secretaría de Educación Estatal y la Secretaría de Investigación e Innovación.
IMPORTANTES AVANCES DE LA MUJER EN TORNO A SUS DERECHOS
Al finalizar la inauguración de la VI edición Congreso Nacional de Género, a cargo del rector de la Universidad Autónoma de Yucatán, el maestro Carlos Estrada Pinto, la doctora Lourdes Consuelo Pacheco Ladrón de Guevara impartió la conferencia magistral “Igualdad, la palabra dice lo que dice y algo más”, es la que hizo un recorrido histórico respecto a los roles que la mujer ha desempeñado y que poco a poco han ido cambiando para que paulatinamente salieran del lugar para cruzar sus estudios profesionales y obtener el reconocimiento de sus derechos incluyendo los políticos.
“Debido a sus actividades como madres, cuidadoras y su trabajo en casa, las mujeres tardan más tiempo en alcanzar sus objetivos profesionales pero lo logran” dijo la especialista en el tema, quien es originaria del estado de Nayarit, recordó que, cuando se habla de género, se habla de lo masculino y de lo femenino, se incluye a los dos y sólo refiere saber de las relaciones que en un momento dado tienen entre sí.
Manifestó que ahora la matrícula de licenciatura a nivel nacional actualmente es mayoritaria de mujeres, pero los logos o los lemas siguen reflejando sólo a lo masculino, por lo que se debe trabajar ahora en que sean más incluyentes.
Por otro lado, reconoció que exista un Programa Institucional de Igualdad de Género, ya que habla muy bien de las políticas rectorales de la Uady.
En tal sentido, afirmó que esto quiere decir que ya se menciona y se hace práctica la equidad de género, ahora el siguiente paso es realizar las debidas armonizaciones de las leyes y reglamentos universitarios acorde con lo igualitario.
En el evento se dan cita estudiantes y docentes de 18 instituciones académicas del sur sureste de la república.
Texto y fotos: Manuel Pool