El Programa Mundial de Alimentos (PMA) de las Naciones Unidas alertó sobre los graves efectos de la crisis climática en las pequeñas islas y estados insulares en desarrollo, y pidió a los donantes más fondos para anticipar la respuesta ante las lluvias e inundaciones que se prevén durante la temporada de huracanes que comenzará en junio próximo en el Atlántico.
“Los efectos que estamos viendo como PMA son múltiples. Uno es que las islas, con su idiosincrasia muy particular, están extremadamente afectadas por la crisis climática. Es decir, tenemos desde la subida de los mares hasta las sequías y las inundaciones”, dijo en la capital panameña la directora regional para Latinoamérica y el Caribe del PMA, Lola Castro.
Las consecuencias del cambio climático y cómo afrontarlas constituyen el mensaje central que el PMA llevará a la IV Conferencia Internacional sobre Pequeños Estados Insulares en Desarrollo (PIED), que se desarrollará del 27 al 30 de mayo en Saint John, Antigua y Barbuda.
Los PEID comprenden 37 naciones miembros de la ONU y 20 miembros asociados de comisiones regionales que ocupan menos del 0.5 por ciento de la superficie mundial y se distribuyen en el Caribe, el Pacífico, el Atlántico, el Índico y el Mar de China Meridional.
Las pequeñas islas y estados insulares se enfrentan a los “efectos tanto de la crisis climática, como de la crisis poscovid y también de la crisis de la deuda”, lo que tiene varios impactos, entre ellos las elevadas tasas de inseguridad alimentaria, explicó Castro.
Inseguridad alimentaria en el Caribe
De acuerdo con el más reciente informe del PMA sobre Seguridad Alimentaria y Medios de Vida en el Caribe, en las pequeñas islas de habla inglesa y holandesa de esta zona hay cerca de “3 millones de personas que están en inseguridad alimentaria”, lo que representa “una mejora con respecto al año pasado”, afirmó Castro.
Pero esa cifra de unas 3 millones de personas en inseguridad alimentaria, es decir, “que no pueden comer todos los días o tener acceso a una comida adecuada todos los días”, continúa siendo “altísima, porque es 70 por ciento más alta que antes de la covid”, precisó la directora regional del programa de las Naciones Unidas.
“Tenemos las islas más grandes como Dominicana, Cuba y Haití (…) que también tienen sus niveles de inseguridad alimentaria bastante elevados. En Haití el 50 por ciento de la población está en inseguridad alimentaria, y en República Dominicana tenemos 1,3 millones de personas” en esa situación, detalló Castro.
Más fondos para actuar anticipadamente
Castro recalcó que el PMA hace intervenciones en 22 islas y territorios del Caribe, además de en República Dominicana, Cuba y Haití, a través del trabajo conjunto con los gobiernos para la entrega de transferencias monetarias, alimentación escolar o alertas tempranas ante el riesgo de desastres, entre otros.
Es por ello que el Programa requiere para los próximos seis meses fondos por unos 95 millones de dólares para desarrollar sus acciones en las pequeñas islas del Caribe, Cuba, República Dominicana y Haití.
En el caso de Haití se necesitan “76 millones de dólares solo para los próximos 6 meses porque, a parte de tener actividades humanitarias, también tenemos (allí) actividades de alimentación escolar, actividades donde compramos a los productores locales para el uso en la isla misma”, explicó la funcionaria.
Texto y foto: EFE / Agencias