Alta demanda del servicio Va y Ven durante las fiestas patri

Miles de familias yucatecas acuden de manera segura y cómoda al Centro Histórico de la capital del Estado abordo de las modernas unidades de transporte público para festejar la Independencia

En un ambiente de alegría, diversión y convivencia familiar, miles de yucatecos y yucatecas acudieron de forma segura y cómoda al Centro Histórico de Mérida a bordo de las unidades del Sistema Va y Ven, para participar en los festejos por el Aniversario 214 del inicio de la Independencia de México en la Plaza Grande.

La Agencia de Transporte de Yucatán (ATY) reportó anteanoche una alta afluencia y demanda de usuarias y usuarios que desde las 20:00 horas comenzaron a llegar al Centro de Mérida para ocupar su lugar en la Plaza Grande y presenciar la ceremonia del Grito de Independencia encabezada por la Encargada del Despacho del Gobernador, María Fritz Sierra, así como del concierto de la agrupación “Calibre 50”.

La ATY recordó que el transporte público se garantiza durante estas actividades para que las familias puedan asistir de forma cómoda y segura a estos festejos. El servicio se amplió hasta las 3:00 horas de ayer, además de que las 15 rutas nocturnas funcionaron en su horario normal hasta las 5:00 horas.

De acuerdo con familias de diferentes zonas de la ciudad y municipios aledaños, aprovecharon este servicio para disfrutar de los festejos, resaltando un ahorro en su economía, además de poder viajar cómodos y sin preocuparse por encontrar estacionamiento en el Centro Histórico.

Asimismo, se reportó una alta afluencia en las rutas nocturnas, ya que las y los usuarios las aprovecharon para disfrutar por completo el concierto del grupo “Calibre 50”.

Ayer, a partir de las cinco horas, algunas rutas modificaron sus paraderos debido al desfile cívico militar, volviendo a sus sitios una vez concluido el contingente. Para mayor información de la reubicación de estos paraderos, puede consultarse las redes sociales de la Agencia de Transporte de Yucatán.

Texto y foto: Darwin Ail