El arzobispo, Gustavo Rodríguez Vega, señaló que no es casualidad que en Yucatán haya paz en comparación con otros estados del país, debido a las estrategias que manejan las autoridades.
“Hay una enorme diferencia en seguridad entre Nuevo León y Yucatán, ya que este estado no se ha vuelto un campo de batalla. Si Yucatán se ha decretado como una zona de paz, no debemos confiarnos”, declaró.
En esta entidad hay realidades menos fuertes y difíciles que las que el Arzobispo veía en Monterrey o Nuevo Laredo, especialmente en la realidad de los reclusorios y hospitales ya que aquí, su impresión sobre estos es positiva.
En cuanto a lo religioso, Rodríguez vega aseguró que en el estado descubrió una realidad nueva, ya que se cuenta con una cultura muy religiosa, pero que aun así no bajará la guardia para seguir trabajando en fortalecer la fe y la evangelización.
Por otra parte, se refirió a los homosexuales como “hijos de dios y hermanos nuestros” y que la postura de la iglesia es respetarlos.
Al hablar del matrimonio entre personas del mismo sexo hizo hincapié en que los menores deben tener una madre y un padre para una buena formación integral, y que en dado caso que no sea así lo lamenta mucho.
A dos semanas de ser Arzobispo de Yucatán, Gustavo Rodríguez, se refirió al Gobernador del Estado, Rolando Zapata Bello como “un buen hombre” y “una persona de buena voluntad”.
Aunque el monseñor dijo que un sacerdote nunca puede demostrarse a favor de un partido político, recalcó que toda la ciudadanía tiene que comprometerse para un bien común.
