Exhortan a padres de familia a cuidar a sus hijos y evitar accidentes
El Ayuntamiento de Mérida autorizó 280 permisos para la comercialización de productos de pólvora y pirotecnia. Así es que los vendedores ofrecerán sus productos en las calles del primer cuadro de la ciudad y la periferia, del 22 al 24 y del 29 al 31 de diciembre.
El alcalde Alejandro Ruz Castro informó que en estos días, la Policía Municipal realizará operativos para verificar, junto con la Unidad de Protección Civil meridana y su homóloga estatal, además de elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), que se cumpla con la normativa establecida, lo que incluye que no haya venta a menores de edad, y que estos no estén en puntos de venta ofertando el producto.
El munícipe recalcó que, en el caso de observar una situación irregular, se tomarán las medidas correspondientes, lo que puede derivar en la remoción del vendedor, y que el número de solicitudes es el mismo que se recibió el año pasado.
Hay que recordar que uno de los requisitos indispensables para obtener la licencia de venta de este tipo de productos es tomar el correspondiente curso de capacitación sobre el manejo de los mismos. Al respecto, el director de Gobernación del Ayuntamiento de Mérida, Ignacio Gutiérrez Solís, comentó que el viernes pasado concluyó este proceso.
Estos cursos son muy importantes, porque ayudan a tomar conciencia para que no haya venta ilegal de pirotecnia, que no se almacenen más de 5 kilogramos de este material en los puestos, que no hayan menores de edad distribuyéndolos, y que en casos de emergencia, los vendedores sepan cómo utilizar el extintor de manera adecuada y atender alguna emergencia.
“Al principio, hace algunos años, había renuencia, pero hoy (los vendedores) se han dado cuenta de que es útil, que ayuda a manejar de forma correcta un producto que tiene cierto grado de peligrosidad, cuidando que no se tengan productos catalogados por la Sedena como ilegales o de procedencia ilícita, y que no haya algún riesgo en el almacenamiento”, explicó.
Gutiérrez Solís recordó que en años anteriores han detectado vehículos que los vendedores, a manera de bodega para reabastecerse, dejaban a la vuelta de sus puestos con 10, 15 y hasta 20 kilos de productos de pólvora, cuando el permiso establece un máximo de hasta 10 kg.
“Eso está prohibido, cuando se han dado casos en años anteriores, hemos decomisado esas cantidades que sobrepasan los límites establecidos, porque hay que tener en cuenta que, por el tema de las altas temperaturas que hay, aún en el mes de diciembre, hay un alto riesgo de que pueda ocurrir un accidente y se pone en peligro a quienes pasan junto”, recalcó Gutiérrez Solís, quien adelantó que en el centro de la ciudad solamente se instalarán 50 puestos de los 280 autorizados en total en el municipio.
El funcionario dejó en claro que ante todo está la seguridad de quienes van a adquirir y quienes venden estos productos, por lo que se garantizará de que no haya invasión a la superficie de rodamiento y la movilidad de las personas en el centro histórico.
Finalmente, pidió a la ciudadanía abstenerse de comprar este tipo de productos a través de las redes sociales, como actualmente se lleva a cabo, y tener mucho cuidado al utilizarlos, ya que son dañinos y peligrosos, de modo que si son utilizados por alguien que no tiene madurez o criterio puede ocasionar accidentes fatales.
“Basta ver en estos días hospitales y los tipos de accidentes que se sufren para tomar conciencia de que esto es un tema que no debe ser operado por niños, ya que debe de realizarse una supervisión máxima de los adultos, pues no se debe dejar al azar que no se le deben entregar productos de pólvora a personas que no tienen capacidad para utilizarlos”, subrayó.
Por estas razones la recomendación es utilizar estos productos con responsabilidad para evitar accidentes de cualquier tipo y evitar que los niños la utilicen, ya que ante todo se debe de prevenir que las fiestas navideñas, se empañen por las lesiones que un menor o cualquier persona pueda sufrir por la quema de bombitas, petardos, chifladores y otros productos que resultan muy atractivos a la vista, pero muy peligrosos y que inclusive, como se ha mencionado con insistencia, con su estruendo afectan a las mascotas.
Perros y gatos son dos de los animales que más sufren con el ruido y los distintos factores asociados a los fuegos artificiales. Este tipo de materiales, como los petardos, alcanzan los 0.5 gramos de pólvora, pero los cohetes pueden llegar hasta los 15 gramos.
La consecuencia más grave que pueden ocasionar para las mascotas es la muerte, ya que el ruido puede derivar en ansiedad o incluso un paro cardíaco. Los animales que más suelen sufrir por la pirotecnia son los perros, a quienes llega a afectar entre un 30% y un 40%.
Entre los daños causados están las complicaciones psíquicas o físicas. Esto es debido a que el oído de estos animales es considerablemente más sensible que el de los seres humanos.
Diversas páginas especializadas en veterinaria aportan algunos de los síntomas que los perros o gatos experimentan cuando experimentan un ataque de pánico por los fuegos artificiales. En ocasiones, los animales tienden a esconderse debajo de una mesa, en una habitación alejada o en el regazo de sus dueños, tratando de sentirse seguros.
Los síntomas más comunes son: ladridos compulsivos, babeo excesivo, llevar la cabeza agachada y la cola entre las patas, agresividad e incontinencia.
Veterinarios y expertos llevan tiempo recomendando que se evite al máximo el uso de pirotecnia, no sólo para el bienestar de los animales, sino para personas con autismo o el propio medio ambiente, que también se ven afectados por la pólvora de los fuegos artificiales.
Texto: Manuel Pool
Fotos: Agencias