Soldados dispararon tiros de advertencia en el centro de Uagadugú, capital de Burkina Faso, y pidieron a los ciudadanos que abandonaran esa zona, donde sobrevolaban varios helicópteros militares a baja altura.
La confusión se apoderó de la ciudad un día después de que un grupo de militares encabezados por el capitán del Ejército Ibrahim Traoré diera un golpe de Estado y derrocara al líder de la junta militar en el poder, teniente coronel Paul-Henri Sandaogo Damiba.
Ante los disparos de aviso de los militares, los comerciantes empezaron a cerrar sus tiendas en el centro de la capital, donde algunas calles volvieron a cerrarse tras levantarse las barreras colocadas por los soldados.
Un militar indicó que se reforzaron posiciones en esa zona como precaución ante un posible despliegue de uniformados todavía leales a Damiba.
Un oficial del Estado Mayor del Ejército aseguró a Efe que el depuesto líder aún se encuentr en Uagadugú.
Damiba “está bien, está en un lugar seguro y se halla bien resguardado”, explicó esa fuente bajo condición de anonimato.
Varios helicópteros fueron avistados en Kamboissin, un distrito norteño periférico que alberga un campamento militar y efectivos de la fuerza antiterrorista Barkhane (liderada por Francia) volando hacia el centro de la ciudad.
Uno de los aparatos aterrizó en el céntrico cuartel militar de Guillaume Ouédraogo.
En un mensaje dirigido a la nación, los golpistas acusaron a Damiba de desviarse del ideal del Movimiento Patriótico de Salvaguarda y Restauración (Mpsr), nombre de la junta que tomó el poder el pasado 24 de enero.
Texto y foto: Agencias