“Cambiar frustraciones por esperanza”

“Al inicio de mi carrera creí que un buen docente era aquel que lograba las mejores calificaciones de sus alumnos. Pero el tiempo, el amor por mi pueblo,  me hicieron descubrir que el verdadero maestro es el que logra arrancar penalidades y frustraciones a los niños y cambiarlas por esperanza”, expresó Fredy Góngora Cabrera tras recibir su reconocimiento como “Maestro Distinguido 2017”.

Tal distinción fue entregada de manos del gobernador del Estado, Rolando Zapata Bello, quien minutos antes encabezó la colocación de una ofrenda floral y guardia de honor en el Monumento al Maestro.

En emotivo evento en el marco del Día del Maestro,  Karla Góngora, hija del galardonado, compartió ante autoridades estatales, federales y magisterio,  la semblanza de Góngora Cabrera, donde además de exaltar su aportación el sector educativo, se comprometió a seguir ejemplo. “Hoy es un placer para mí describir su trayectoria. Pero sobre todo, experimentar como hija y futura docente,  mediante su ejemplo, una forma de conducir mi vida con amor. Siempre poniendo el corazón por delante. Deseo que este impacto sea para todo aquel que es y será un maestro”. Su participación fue sellado con un fuerte abrazo.  “La vida es un espacio de tiempo donde cada quien vive la forma como quiere vivirla. La vida es un breve espacio de tiempo y una oportunidad  para transformar tu entorno en un lugar para disfrutar y para amar”, expresó Fredy Góngora al iniciar su participación.

Entre sus logros se encuentra la creación de la metodología “Los nuevos alquimistas”, fue orador en la Casa América de Madrid, España y fue maestro de excelencia por el Instituto Tecnológico de Monterrey. Compartió que hace cinco años tomó la decisión de cambiar el rumbo de su vida como educador; dejar de enseñar y comenzar a inspirar. “La tarea no ha sido fácil y me ha constado descubrir que para ser maestro, además de educación y pasión, se necesita de muchísimo amor”. En su participación el mandatario estatal expuso que la verdadera educación; la que perdura y trasciende, empieza en el binomio hogar y salón de clases, y va mucho más allá de memorizar información: es aprendizaje con un elemento social y  con un sentido humano único.

“La docencia debe aspirar a esta auténtica enseñanza, porque sólo así es como se forman los seres humanos preparados, pero también, conscientes de sus capacidades, sus derechos, sus responsabilidades y obligaciones”, señaló.

Planteó la necesidad de que el sistema educativo alcance la creatividad y conciencia social necesarios para este aprendizaje, “el elemento clave es la docencia, docentes comprometidos con el desarrollo de nuestros niños, docentes que comprendan la enorme labor que esto implica para toda la sociedad y ese es el compromiso que el maestro Fredy ha mostrado a lo largo de su trayectoria.

Jesús Gómez

Leave a Reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.