El chofer de autobús que atropelló a una abuelita y su nieta el pasado 2 de mayo enfrente de un supermercado en la avenida Quetzalcóalt, en la que murió la niña de seis años, quedó libre por no tener antecedentes y luego que la aseguradora se comprometió a pagar la reparación de los daños.
La juez Suemy del Rosario Lizama Sánchez, del Juzgado 1 de Control, calificó de legal la detención del conductor durante una audiencia de control de la detención celebrada ayer, por lo que dio de plazo el 10 de mayo para celebrar la audiencia de vinculación o no a proceso.
Mientras tanto, el chofer Juan Pablo Tec Pech, de la Alianza de Camioneros seguirá el proceso en libertad ya que no ha tenido antecedes de este tipo, la aseguradora garantizó 60 mil pesos por reparación del daño y porque no huyó del lugar de los hechos, pese a que hubo personas que lo quisieron linchar. Los fiscales pidieron que el chofer fuera privado de su libertad, pero la juez no encontró elementos suficientes, pese a que en la relatoría de los hechos escuchó que el accidente ocurrió cerca de las 5:30 de la tarde en avenida Quetzalcóatl con calle 22 de la colonia Chichén Itzá, donde la niña Mía Graciel Cauich Sabido, de seis años, y su abuela materna Nanci Baas Quintal, de 49 años, cruzaban la avenida. Previamente se había adelantado en el cruce la mamá de la menor fallecida, Sheila Sabido Baas, de 25 años, junto con su otra hija de tres años, quienes lograron atravesar antes de que se pusiera en verde el semáforo. La juez no accedió a la solicitud de los fiscales de imponer la prisión preventiva como medida cautelar, ya que de acuerdo con lo vertido por los propios fiscales en la audiencia, el imputado permaneció en el lugar y no tiene antecedentes de hechos similares.
– ECO
