Alimentos de la canasta básica se han encarecido entre 10 y 35 por ciento en el último año, de acuerdo con el Grupo Consultor de Mercados Agrícolas (GCMA).
Los aceites y grasas cuestan 10.7 por ciento más caro que hace un año; el arroz acumula un incremento de 14 por ciento; el frijol de 33.4 por ciento, y el azúcar cuesta 35.2 por ciento más caro que hace doce meses, detalló la firma.
El frijol, según el tipo y el establecimiento donde se venda, oscila entre 18 y hasta 36 pesos el kilo al menudeo en supermercados. Hay casos como el del frijol pinto originario de Chihuahua o el pinto nacional que se han encarecido hasta 68 por ciento en los últimos 12 meses. Sin embargo, mayor incremento registra en esta temporada el aguacate Hass que llega a comercializarse de 23 a 48 pesos por kilo en las centrales de abasto, lo que implica un encarecimiento anual de entre 53 y 108 por ciento en términos anuales.
En menor medida pero también por encima de la inflación general han subido los precios de la tortilla en 3.8 por ciento; sal 5 por ciento; harina de maíz en 9.2 por ciento; leche pasteurizada en 2.9 por ciento; carne de cerdo en 3.2 por ciento; carne de res en 2.4 por ciento; jamón en 8.5 por ciento, y de las frutas en 12.7 por ciento, detalló la consultoría. La inflación general, referida al aumento que, en promedio, registraron los precios de todos los bienes y productos que se comercializan en México, se ubicó en 2.97 por ciento hasta septiembre, de acuerdo con el reporte más reciente del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
En cambio, sólo en alimentos la inflación acumulada llegó a 5.21 por ciento en el último año, de septiembre de 2015 a septiembre de 2016, y sus precios se han encarecido a un ritmo de 0.42 por ciento mensualmente. De todos los grupos analizados por el Inegi para medir la inflación, los alimentos son los que más han subido de precio, ya que los gastos en transporte crecieron 2.73 por ciento.
– La Jornada