Capo mayor

Armando Escalante
Periodista y analista político

El muy desastroso ejercicio de gobierno de Manuel López ya es famoso internacionalmente y no es precisamente sólo por mediocre sino por las inconfesables evidencias que presuntamente mantiene con grupos criminales.

El inquilino del Palacio Nacional en alguna ocasión se entrevistó con la madre de famoso capo preso en EE.UU, pero antes defendió el nombre de éste al no llamarlo por su apodo sino decirle “señor Guzmán…”, y tiempo después confesó que salió en defensa de uno de sus hijos para que no fuera capturado. Demasiadas coincidencias.

En una entrevista con Proceso, Verónica Sarauz, viuda del asesinado candidato presidencial de Ecuador, sostiene que “la negligencia” de López Obrador ha hecho que los cárteles mexicanos se expandan a Sudamérica y deplora que éste salga en su defensa y diga que “no hay elementos para señalar al Cártel de Sinaloa en el asesinato”.

Y es que dicha afirmación en la conferencia matutina del presidente caló hondo porque no es la primera vez que el mandatario sale a defender a los narcotraficantes que tantos crímenes llevan a lo largo y ancho de la nación. Pareciera que con estas dispensas el señor López o sabe mucho respecto a quiénes son los criminales que mataron al candidato ecuatoriano o de plano forma parte de alguna extraña y secreta alianza con los señalados. 

En la entrevista con Proceso, una semana después del magnicidio que conmocionó a Ecuador y al mundo, la viuda señala que en estos momentos de dolor prefiere ser muy cauta pero no se queda callada ante el caso de Amlo:

“Un día después del crimen, una reportera le preguntó al presidente en “la mañanera” si no era una “mala señal” que el homicidio “presuntamente fue por el Cártel de Sinaloa o un capo del Cártel de Sinaloa”.

“El mandatario comenzó por externar sus condolencias a la familia de Villavicencio y al pueblo de Ecuador y después dijo: “Acerca de las causas, pues no me atrevería a adelantar nada sobre los motivos porque no hay elementos. Son, si acaso, hipótesis, y pueden ser hasta conjeturas. No hay que olvidar que siempre, y más en tiempos electorales, se inventan cosas, entonces hay que actuar con mucha responsabilidad, con mucha seriedad, no culpar a la ligera a nadie, esperar las investigaciones y esperar que se dé a conocer el resultado de la investigación”.

“Yo le puedo decir al presidente López Obrador –señala Sarauz– que no creo que a nadie se le pueda ocurrir dejar una tarjeta diciendo ‘fuimos nosotros (los responsables del magnicidio) y aquí estamos para hacernos valer’. O sea, Fernando se enfrentaba con grupos delincuenciales demasiado grandes y demasiado violentos. Entonces, la consecuencia de este enfrentamiento le costó la vida”.

“Hay que preguntarse con qué calidad moral (el mandatario mexicano) puede decir ‘no hay pruebas’, porque mi esposo está asesinado y porque la negligencia que él ha tenido en su país ha hecho que no se pueda garantizar la seguridad ni de los mexicanos, y ha hecho que estos cárteles busquen expandirse en otros territorios”.

México “es un es un país demasiado violento y, bueno, el señor no puede decir muy suelto de huesos que no hay evidencia de que el cártel haya participado en el asesinato de mi esposo, porque mi esposo estaba denunciando estos cárteles, y cuando hay una denuncia todos son sospechosos”.

Sostiene que el tema del narcotráfico es “sumamente delicado y sumamente peligroso, y lo vive México con los cárteles, pero el gobierno está para combatirlos, no para hacerse de la vista gorda o exportarlos a otros países”.

Villavicencio, indica la viuda del político y periodista, “muchas veces nombró” al Cártel de Sinaloa y el pasado 2 de agosto se refirió al saludo de López Obrador a la mamá de Joaquín “El Chapo” Guzmán como un “modelo de la narcopolítica que Ecuador está a punto” de vivir.

Hasta aquí las citas textuales al reportaje de Proxeso: ¿alguna duda? 

El xix.— La oposición debe replicar todos las informaciones que surgen a diario sobre el desgobierno lopezobradorista en todos los medios y ocuparse cuando menos de esa tarea que otros ciudadanos hacen de manera voluntaria. No filtran un dato y ni siquiera reenvían un editorial, bah…ni un meme. Están muertos de miedo.