Activistas forman a ciudadanos de municipios para que defiendan sus derechos

La asociación realiza distintos proyectos para que las personas ejerzan justicia cuando se dé algún tipo de abuso

La presidenta y representante legal de “Ciencia Social Alternativa Kóokay”, Nancy Walker Olvera, declaró que mientras la gente esté más informada, se logrará que defienda sus derechos.

Indicó que debido a la pandemia aumentó la violencia, el abuso sexual y se estuvieron realizando talleres en los municipios de manera virtual, con mucho interés por parte de la gente, específicamente en Maní, Ticul y Oxkutzcab. También diseñaron un manual de protección y protocolos de violencia infantil, que fue un trabajo de investigación de dos años, con el objetivo de que las dependencias lo apliquen para sancionar cuando se den abusos.

Antes desarrollaron un proyecto de promoción de Derechos de las Mujeres (proyectos financiados por la fundación World Day Pray de Alemania).

“El trabajo por y desde los derechos de las mujeres ha sido desde nuestros inicios, un objetivo y línea de trabajo claros”, declaró.

A partir del impulso financiero de la fundación alemana “World Day Pray” (organización no gubernamental ecuménica, que trabaja en pro de los Derechos de las Mujeres), se han promovido diversos proyectos.

“Para el año 2008 nos fue aprobado el ‘Proyecto de género, derechos humanos de las mujeres y violencia’, consistiendo en talleres en relación a los derechos de las mujeres, desarrollado en comisarías del norte de Mérida”, destacó.

Para 2009 se aprobó el proyecto “Mujeres por una vida libre de violencia”, dirigido a la formación de Promotoras Comunitarias en materia de equidad de género, derechos de las mujeres y vida libre de violencia.

Nancy Walker resaltó que una de las acciones de promoción comunitaria es acercar los trabajos a comisarías del norte de Mérida y promover procesos de fortalecimiento.

Este  se llevó a cabo en comisarías de Mérida, Hunucmá e Izamal. Para el periodo 2011-2012 fue aprobado el proyecto de género “Mujeres por la vida”, cuyo objetivo fue la promoción de proyectos productivos a partir del rescate de conocimientos locales sobre plantas medicinales, esto motivado por las propias mujeres, varias de ellas ya habían participado en los proyectos previos.

Se trabajó con mujeres de Xcunyá, Dzibilchaltún, Hunucmá y Chel.  Para el año 2012-13, se le dio seguimiento al proceso a través del proyecto “Seguimos caminando”, con el que se dio continuidad y profundidad al trabajo productivo en las mismas comunidades.

La misma organización (World Day Pray) aprobó, para el periodo 2014-16, el proyecto “Compartiendo y visibilizando experiencias transformadoras de mujeres”, cuya intención es recuperar, visibilizar y honrar las historias de mujeres que se han reconstruido y seguido adelante después.

“Desde los inicios del trabajo como organización (Kóokay) se decidió que una de las acciones de promoción comunitaria sería acercarnos a comisarías del norte de Mérida y promover procesos de fortalecimiento y empoderamiento, desde una perspectiva de derechos humanos, en la medida en que las personas de las comunidades, los diagnósticos comunitarios participativos y acciones puente indicaran la pauta a seguir”, continuó Walker Olvera.

Fue así que, desde 2005, se llevaron a cabo diversas acciones puente (talleres de derechos de la mujer, derechos humanos, equidad de género, fortalecimiento y organización grupal), así como proyectos puntuales que dieran respuesta a ciertas necesidades comunitarias, a través de grupos de base, grupos de madres de familia a través de las escuelas (primarias y secundarias), grupos de docentes, así como grupos de mujeres de base (productivos y/o religiosos).

Texto y fotos: Darwin Ail / Cortesía