Como reconocimiento las gestiones realizadas para colocar y develar el monumento del “Emigrante Libanés” develado el día de ayer en el Puerto de Progreso con motivo de los 140 años de fundarse la comunidad libanesa en Yucatán, se llevó a cabo un desayuno en el Club Libánes de Mérida, para distinguir a Julían Zacarías Kuri, alcalde de Progreso, Ricardo Díaz Nájer, presidente del club Libánes de Mérida, y Miche Samlati Salem, presidente del Centro Libanes de la Ciudad de México, encargados de está gestión.
En primera instancia y de manos del Cónsul Honorario de Líbano en Mérida, Ricardo Elías Déjer Nahum, el alcalde Zacarías Kuri, recibió el galardón y comentó que cuando él tomó la alcaldía Progreso estaba muy abandonado y no se había logrado acercar a la comunidad libanesa al puerto para trabajar con ella y darle el lugar que le corresponde. Dijo que la colación de la estatua es un legado para las futuras generaciones para que recuerden por siempre a esas personas que vinieron a abrir camino, lo que permite que ahora cada quien haga algo desde sus trincheras: “A mi me tocó impulsar el desarrollo de mi ciudad, y que se sepa que siempre se va trabajar con mucho órden y poniendo en alto a la comunidad libanesa, para la cual trabajaré todos los días hombro con hombro, hasta que Progreso sea el que todos queremos.” Apuntó Zacarías Kuri
El galardonado también, Ricardo Díaz Najer dijo que el agradecimiento es la memoria del corazón, y que no había frase mejor para describir lo que sienten aquellos que trabajaron por colocar la estatua del “Emigrante Libánes” en el puerto de Progreso; acción que se hizo para agradecer a sus antepasados por lanzarse a buscar una nueva vida y con ello trazar un futuro, donde la cultura, la economía, las innovaciones y tecnología que trajeron con ellos son parte de la seguridad que hoy vive está comunidad en la entidad.
En el acto estuvo presente también Miche Samlati Salem, presidente del Centro Libanes de la Ciudad de México, quien al tomar la palabra expresó sentirse honrado y agradecido de haber sido invitado a la develación del monumento, y que la ceremonia para tal fin quedará grabada en su memoria y corazón. A su vez, reconoció que la comunidad en Mérida es una de las más grandes e importantes del país, y que hoy más que nunca los lazos entre las comunidades de la Ciudad y México y Mérida están más unidos que nunca, tan es así, que refirió, sobre la importante cantidad de libaneses que se han venido a vivir a la ciudad meridiana, y a quienes se les ha recibido con los brazos abiertos.
Por su parte Cónsul Honorario de Líbano en Mérida, Ricardo Elías Déjer Nahum, comentó que la comunidad libanesa tiene un compromiso con México, al ser la heredera de aquellos que tuvieron el arrojo de cruzar el mundo entero, sin hablar el idioma y una maleta de esperanza, para llegar a trabajar duro y fuerte. “Es algo que la comunidad libanesa tiene que tener muy presente al ser dignos herederos del bagaje moral y cultura del esfuerzo en la que fueron educados. Sobre la gestión para crear, traer y colocar el monumento con un peso de 30 toneladas, considero que fue muy fácil gracias a la decidida colaboración de la comunidad libanesa tanto de Mérida como de la Ciudad de México.
También fue reconocido en el evento, Nabih Chartouni Jalil, presidente de La Unión Libanesa Cultural Mundial, como parte del equipo de las gestiones y promotor y maestro de la enseñanza de la lengua árabe.
Por Lorena-González-Boscó