Ante la polarización, el avance de la modernidad y el secularismo promovidos por las distintas minorías que promueven la ideología de género, el derecho al aborto, el matrimonio igualitario, el Consejo Interreligioso del Estado de Yucatán hizo un llamado para recordar que el único camino posible para la convivencia social es la paz verdadera, la buena voluntad y el respeto entre ciudadanos, organizaciones sociales y autoridades.
En rueda de prensa realizada en un hotel ubicado en el centro de la ciudad, el subdirector de la Fundación Conciencia Nacional y por la Libertad Religiosa, Cristian Badillo Gutiérrez, declaró que manifiestan que México necesita una sociedad en paz, con tolerancia y respeto a las demás personas, aunque no compartamos la misma fe o no tengamos fe alguna.
En la conferencia estuvieron de la Iglesia Ortodoxa Antioquía, José Morán Pineda; de la Convención Regional Bautista Peninsular, Víctor Villanueva Abuxapqui; de la Arquidiócesis de Yucatán, Óscar Viñas Olvera, C. O. y de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, Martín Montaño Alonzo, entre otros.
Badillo Gutiérrez dijo que solamente con la paz y el respeto al prójimo podremos construir un mejor país, un mejor estado y, por consiguiente, mejores familias, individuos y ciudadanos.
Señaló que son un grupo compuesto por diversas asociaciones religiosas en el Estado de Yucatán que conjuntamente promueve el bienestar de los individuos, las familias y la sociedad mediante la promoción y defensa de los derechos humanos relacionados con la libertad religiosa y la objeción de conciencia.
Indicó que se rigen bajo los principios de respeto, tolerancia, honestidad, solidaridad, transparencia, responsabilidad ética y promoción de la participación. “Deseamos privilegiar las coincidencias fundamentales para preservar la vida y la familia, fortaleciendo el tejido social de las comunidades en Yucatán”.
Explicó que creen que la familia es ordenada e instituida por Dios y formada por el matrimonio entre el hombre y la mujer natural, que es esencial para su plan eterno, “que los hijos tienen derecho a nacer y ser educados por un padre y una madre que honran sus votos matrimoniales”.
Indicó que creen en el derecho a la vida desde su concepción hasta su muerte natural, es el derecho que se reconoce a cualquier ser humano, que le protege de ser privado de la vida por terceros y se considera un derecho fundamental para toda persona.
Por su parte, de la Arquidiócesis de Yucatán, Óscar Viñas Olvera, señaló que actualmente hay una sociedad líquida en América Latina y Estados Unidos, es instantánea, el secularismo que seca al ser humano, “lo sagrado ilumina al ser humano, la instantaneidad nos impide ver lo sagrado”.
Lamentó que actualmente, cuando una generación no vive apegada a Dios, sus hijos muy difícilmente se acercarán, “estamos convencidos de que la religión puede formar mejores familias, no quiere decir que se acaben los problemas, pero se solucionan mejor”.
Dijo que antes de la pandemia realizaron talleres de Derechos Humanos y dos talleres durante el año, “asistimos a los diferentes templos para explicar la labor que realizamos, damos testimonio, sabemos que
Roma no se hizo en un día, pero si se quemó en una noche”.
A su vez, Villanueva Abuxapqui explicó que el hombre que vive sin creer en Dios solo se engaña, “es como andar en el mar sin una brújula”.
TEXTO Y FOTO: DARWIN AIL