En trágico hallazgo se registró el pasado domingo en un predio de la colonia Santo Domingo, en Hunucmá, donde un hombre fue encontrado sin vida por sus propios familiares. El hecho ocurrió en un domicilio ubicado en la calle 34, cuando sus parientes ingresaron a una de las habitaciones y lo encontraron inmóvil, por lo que de inmediato solicitaron ayuda al número de emergencias 911.
Minutos después arribaron agentes de la Policía Municipal Coordinada de Hunucmá y paramédicos, quienes intentaron brindarle los primeros auxilios. Sin embargo, ya no contaba con signos vitales. La zona fue acordonada en espera del personal de la Fiscalía General del Estado y del Servicio Médico Forense para las diligencias correspondientes.
De acuerdo con información recabada, el hombre era conocido en la zona por su consumo frecuente de alcohol y solía reunirse con otras personas para ingerir bebidas alcohólicas en ese mismo predio.
Este lamentable suceso vuelve a poner sobre la mesa la relevancia de atender, desde el ámbito municipal, los factores que contribuyen a las muertes por suicidio y a situaciones de riesgo relacionadas con el abuso de alcohol.
En municipios como Hunucmá, la existencia de espacios sin supervisión, el consumo habitual de bebidas alcohólicas y la falta de atención oportuna incrementan la vulnerabilidad de grupos en riesgo. Por ello, especialistas en salud pública apuntan que la prevención de adicciones es una herramienta fundamental para reducir las muertes violentas y conductas autolesivas.
Responsabilidad municipal en programas de prevención
La responsabilidad de impulsar y fortalecer estos programas recae en la administración local, encabezada por la alcaldesa Cristiana Pérez Bojórquez, quien tiene la capacidad de implementar acciones comunitarias para atender el consumo problemático y promover servicios de apoyo emocional y psicológico.
Entre las estrategias que resultan prioritarias se encuentran: talleres y campañas de sensibilización sobre los riesgos del abuso de alcohol; actividades recreativas, deportivas y comunitarias enfocadas en la prevención; coordinación con instituciones de salud mental para la detección temprana de señales de alarma y programas de acompañamiento para familias en situación de vulnerabilidad.
La puesta en marcha de estos mecanismos permite reducir factores de riesgo y fortalecer el tejido social, especialmente en zonas donde el consumo de alcohol continúa siendo un detonante de conductas de riesgo.
La muerte registrada el domingo subraya la importancia de que las autoridades municipales prioricen programas de salud pública y prevención de adicciones. Especialistas coinciden en que atender de raíz estos problemas puede salvar vidas y evitar que situaciones similares continúen presentándose en la comunidad.
Texto y foto: Redacción




