La discriminación y maltrato que sufren las personas de la tercera edad en el albergue “Jesús de la Misericordia” fue lo que motivó a don Manuel Nieves Solís, de 76 años de edad, a protestar y pedir ayuda al Gobierno del Estado, pues dijo que está harto y cansado de los malos tratos que sufre en ese lugar.
“Don Manuelito”, como le dicen sus conocidos, salió del albergue para plantarse frente a Palacio de Gobierno y pedir ayuda para que revisen las condiciones de la casa-hogar.
En entrevista, el septuagenario acusó a la directora del albergue, Landy Carrillo Salazar de ser una persona prepotente y “maldita” puesto que maltrata a muchos de los usuarios del albergue, a pesar de que estos pagan una cuota mensual.
“Pido que hagan justicia y que saquen a esos ladrones que nada más roban en el albergue, por culpa de ellos ya no van los abuelitos. Cuando yo llegue allá para navidad nos llevaban infinidad de regalos, pero ahora ya no va nadie porque ya conocen el tipo de ratas que son los directivos”, acusó.
Nieves Solís está cansado y harto de todas las injusticias que imperan en ese lugar, ya que recibe muchos maltratos, como por ejemplo que le patean la puerta, que él asegura compró con su dinero.
El afectado aseguró que casi todos sus compañeros del albergue lo apoyan en la decisión que tomó de protestar, puesto que lo único que ellos quieren es justicia.
Agregó que la directora les cobra dos mil pesos a cada viejito por su estancia, lo que no se le hace justo. “Que la saquen de allá son malos elementos que no sirven para atender un albergue, porque no nos dan de cenar. Sólo nos dan un paquete de galletas cada semana, desde hace once años sólo nos dan de comer huevo revuelto con un poco de sobras de carne, ya no queremos seguir así”, concluyó.
El albergue se ubica sobre la calle 72 número 496 entre 55 y 57 de la colonia Centro.
–Elena Martín López
