Denuncias de narcotráfico y violencia empañan primeras campañas judiciales

Tras dos semanas del inicio de las inéditas campañas judiciales de México, ya hay más de una docena de candidatos acusados por organizaciones civiles de tener vínculos con el narcotráfico, asesinatos o criminales, lo que muestra los riesgos de elegir por voto popular a jueces, denuncian varias ONG defensoras de los derechos civiles.

Ante la elección del 1 de junio, el grupo Defensorxs documentó 13 “candidatos relacionados con el crimen organizado, delitos sexuales, sectas político-religiosas y otras irregularidades” en el sitio ‘Justicia en la mira’, donde resalta Silvia Rocío Delgado, exabogada del capo Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán Loera.

Delgado, candidata a jueza penal local en el estado de Chihuahua, se integró al equipo de defensa del ‘Chapo’ en 2016, cuando “su papel consistió en servir como enlace directo con Guzmán Loera, revisando amparos interpuestos y manteniéndolo informado sobre su situación jurídica”, según la asociación.

También sobresale Francisco Herrera Franco, candidato a juez penal federal de Michoacán, donde está acusado de pactos con criminales, le apodaban “el fiscal del terror” cuando ocupó tal cargo (2020-2022) y está señalado por posible implicación en el asesinato de los periodistas Roberto Toledo y Armando Linares en 2022.

“No podemos permitir que quienes cuentan con serias acusaciones de corrupción, violencia y complicidad con el crimen organizado intenten ser ahora los principales responsables de la impartición de justicia”, denunciaron la agrupación y otras siete en un pronunciamiento.

La justicia envuelta en polémica

La polémica escaló esta semana porque Nicollino Cangiamilla, candidato a magistrado en Sonora, estado del noroeste, denunció ante el Instituto Nacional Electoral (INE) al colectivo Ni Una Más Hermosillo, que lo acusa de negligencia como director del sistema penitenciario local, donde falleció la joven Paula Josette durante una visita conyugal irregular.

Briseida Arizona Velarde, madre de la víctima, lamentó en una entrevista con EFE que el INE, encargado de organizar los primeros comicios populares de jueces, magistrados y la Suprema Corte, permitió la candidatura del exfuncionario, acusado de omisiones en los protocolos de seguridad de este y otros casos.

“Es una burla, muchos candidatos incumplen requisitos mínimos del perfil al puesto que aspiran, en funciones anteriores violentaron derechos humanos, hubo omisiones, negligencias, no actuaron conforme a su responsabilidad pública, es lamentable que por desconocimiento vayamos a votar, sin conocer a los candidatos”, expresó la madre.

Texto y foto: EFE