La cerveza es una de las bebidas más queridas por los mexicanos. Muchos disfrutan bebiéndola directamente de la botella, mientras otros prefieren darle un toque especial combinándola con ingredientes como limón, sal, chile en polvo o incluso diversas salsas. Aunque existen varias teorías sobre el origen de las micheladas, ninguna ha sido confirmada del todo.
Una de las versiones más aceptadas es que la michelada nació en San Luis Potosí, específicamente en el Club Deportivo Potosino. Según esta teoría, un socio del club llamado Michel Ésper solía pedir una cerveza con limón, hielo, sal y tomarla con un popote en una copa llamada Chabela durante los años 70.
Esta mezcla, que en su momento podía confundirse fácilmente con una limonada de cerveza, fue un tanto inusual ya que nadie acostumbraba a tomar cerveza con hielo en esa época. Con el tiempo, la bebida se popularizó dentro del club y los demás miembros comenzaron a pedirla usando el nombre de Michel junto con el sufijo “ada”, similar a la copa Chabela, resultando en el nombre “Michelada”. A lo largo de los años, la receta se ha enriquecido con la adición de más salsas y escarchados de chile. Asimismo, el nombre ha evolucionado, y en algunos lugares se le conoce simplemente como “Chelada”.
Una teoría alternativa sugiere que el nombre “Michelada” proviene de la frase “Mi chela helada”. Aunque esta versión también tiene sus seguidores, el origen exacto de esta deliciosa combinación sigue siendo un misterio. Lo que es indiscutible es que la michelada ha ganado un lugar especial en el corazón y el paladar de los mexicanos.
¿Qué opinas? ¿Cuál crees que sea la verdadera historia detrás de la michelada?