El subsecretario de Educación Básica, Roberto Herrera Mass, manifestó que se llegó a tener hasta 30 casos de niños con la enfermedad de Coxsackie en la primaria de Tankuché, Calkiní, los cuales han ido disminuyendo, ya que los niños con síntomas se quedan en casa.
En entrevista, el funcionario comentó que, en la comunidad de Tankuché, Calkiní, la semana pasada se tenían 30 casos de la enfermedad de manos, pies y boca, causada por el virus Coxsackie, pero que actualmente se ha reducido a 23 casos.
Herrera Mass dijo que los niños han estado mejorando su condición de salud, ya que van superando la etapa evolutiva del virus, por lo que se espera que, durante las próximas semanas, los casos sigan disminuyendo y no haya más riesgos, sobre todo en los niños de preescolar.
El subsecretario de Educación Básica recomendó que la principal medida preventiva es que el niño que presente algún síntoma se aísle, que no acuda a la escuela y permanezca en su casa, ya que la enfermedad causa molestias, como comezón y fiebre. Recalcó que, al quedarse en casa, se evita que otros niños se contagien.
El docente comentó que, una vez que el niño ha superado el contagio, ya no vuelve a darle Coxsackie. Recordó que esta enfermedad viral solo afecta a niños en edad preescolar.
Roberto Herrera indicó que, aunque se sospechó que en Santa Cruz Ex Hacienda se habían reportado casos de Coxsackie, esto resultó ser falso, ya que los casos anteriores fueron superados, y los más recientes se concentran en Tankuché.
El subsecretario dijo que, ante un posible caso de Coxsackie en las escuelas, la recomendación es acudir al médico para confirmar el diagnóstico y, posteriormente, aislar al niño con las medidas necesarias. Afirmó que las escuelas se mantienen sanitizadas, se aplica gel antibacterial, se limpian los espacios constantemente y los encargados del plantel realizan filtros a la hora de entrada para evitar que accedan niños con síntomas de la enfermedad. Finalmente, señaló que los niños no deben regresar a clases hasta que hayan superado los efectos.
Texto y foto: Agencias
