Estamos a un día de la jornada electoral extraordinaria para elegir a las personas juzgadoras del Poder Judicial de la Federación y del Poder Judicial de Yucatán.
Todos estamos conscientes que se trata de unos comicios inéditos, que no se han visto en México desde hace más de un siglo, pero los tiempos cambian y con los votos, independientemente si son pocos o muchos, ahora los ciudadanos tendrán la oportunidad de decidir sobre las personas que los juzgarán y defenderán sus derechos humanos.
Hemos escuchado hasta el cansancio llamados a votar y a no hacerlo, pero la decisión final será de cada uno de nosotros, pues, como dijo ayer la magistrada presidenta del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, Mónica Soto, hasta no ir a votar también es nuestro derecho. Por ser elecciones inéditas las descalificaciones no se hicieron esperar, ya es cuestión de cada uno creer o no lo que se dijo, leímos o vimos en la televisión, pero los grandes cambios siempre encuentran resistencias.
Por ejemplo, cuando a la mujer se le permitió también participar con su voto en las elecciones hubo voces en contra, con las peores descalificaciones, pues eran tiempos en los que era nula o ausente la defensa de los derechos de las mujeres.
Así que no tema salir a votar y tampoco tema llevar su acordeón, siempre que sea realizado por usted mismo, pues lo que está prohibido es que su voto sea determinado por partidos políticos u organizaciones que trataron de orientar la voluntad popular en las últimas horas.
A esos papelitos sí hay que ignorarlos, porque las intenciones, aunque sean buenas, es la de incidir en el voto popular y eso, además de un delito electoral, es reprobable.
Si todavía no sabes dónde votar, checa los sitios de internet del Instituto Nacional Electoral (INE) y del Instituto Electoral y de Participación Ciudadana (Iepac) de Yucatán.