Editorial de Peninsular Punto Medio

La aprobación por parte de la Cámara de Diputados a la ley por el que la Guardia Nacional se adhiere a la Secretaría de la Defensa Nacional sigue despertando reacciones a nivel nacional e internacional.

Ayer, Amnistía Internacional expresó que no están de acuerdo con lo aprobado por las siguientes razones:

“Amnistía Internacional lamenta la aprobación en la @Mx_Diputados de reformas a la #GuardiaNacional.

“¿Por qué es preocupante?

1.- Posibilita que elementos de la GN puedan pedir licencia para ocupar cargos públicos, con lo cual se corre el riesgo de que tomen control del rumbo del país.

2.- Se formaliza la adscripción de la GN a #Sedena y su funcionamiento como fuerza armada.  

3.- En caso de delitos, la GN podrá tener contacto con la evidencia antes que el Ministerio Público, lo que aumenta el riesgo de manipulación de pruebas y de encubrimiento de violaciones cometidas por elementos militares, fomentando la impunidad.

4.- Faculta a la GN para que realice labores de inteligencia en temas de seguridad pública.

“Llamamos al Congreso de la Unión a NO aprobar esta reforma y analizarla a la luz de los derechos humanos. #NoALaMilitarización #SeguridadSí”, señala el organismo en sus redes sociales.

La oposición en México también ha criticado la reforma, sobre todo que los integrantes de la Guardia Nacional puedan pedir licencia para ocupar cargos públicos.

Sin embargo, la presidenta Claudia Sheinbaum ha dicho que ese punto en especial es facultad de los miembros de las fuerzas armadas desde la Constitución de 1917. Es decir, no es nuevo y los que ahora lo critican no saben la historia.

Por ahora ya la Guardia Nacional quedó adscrita a la Sedena, aunque mantienen su mando civil.