Yucatán le pisa el acelerador en ambientalismo. Esta semana quedó demostrado que este tema es prioridad en el Gobierno del Estado. La Alianza Latinoamericana para la Pesca Sustentable y la Seguridad Alimentaria (Alpescas) realizó hace unos días la Cuarta Reunión Extraordinaria donde se busca transformar toneladas de artículos de pesca en productos de oficina, vehículos y bolsos.
Anteayer, el gobernador Mauricio Vila Dosal anunció el arranque de una campaña permanente de saneamiento de mares, cenotes y manglares, y en estos últimos espera restaurar 50 mil hectáreas.
Por su parte, el Ayuntamiento de Mérida anunció que para celebrar el Día Mundial del Medio Ambiente plantarán 15 mil árboles, del 5 de junio al 27 de julio, aunque se indicó que lo más importante de esto es que los ciudadanos se involucren también. En el primer caso, que también compren los artículos que se reciclan, porque lo que se busca es que estos no terminen en los océanos.
Respecto a los saneamientos de mares, cenotes y manglares, que cuando uno acuda a estos lugares lleve su bolsa donde depositará la basura. Más para la gente porteña, porque los desperdicios que generan tienen muchas posibilidades de que si éstos no terminan en el relleno sanitario, acaben en el mar.
Son muchas las medidas que los yucatecos ya deben poner en práctica, como señaló la ambientalista Maritza Morales Casanova que, por ejemplo, el aceite de cocina que sobra debe ponerse en un envase para depositar en sitios especiales, ya que éste puede terminar contaminando el agua.
También utilizar recipientes herméticos cuando se va a comprar la comida para que el de la cocina económica no use tanto unicel y platos desechables. Parece poco, pero si cada vez más lo hacen, se dará el cambio.