Editorial de Peninsular Punto Medio

La charla por WhatsApp entre la ministra Norma Lucía Piña Hernández, presidenta de la Scjn, y el senador Alejandro Armenta Mier echó por tierra la fama de estoicismo por la que había navegado la jurista. Del senador ya sabíamos cómo se las gasta y no hay mucho que agregar.

Lo que sí podemos apuntar es que el legislador poblano, quien ahora es el presidente de la Permanente, es decir, titular del Poder Legislativo, no mintió y ahora todos los que lo criticaron, principalmente entre la oposición, se tuvieron que morder la lengua.

Y es que cuando hizo la denuncia pública en días pasados cientos de opinadores y ciudadanos, principalmente ligados a la oposición, denostaron al senador, tachándolo de todo, incluso de mentiroso, pues los pantallazos del celular podrían ser falsos.

Pero la carta de la ministra, en la que aceptó haber sostenido esa charla que el senador calificó como de amedrentamiento por su labor en la Cámara Baja, dejó sin palabras a los que la apoyaron, entre ellos, encabezando el pelotón, el ex presidente de la República, Felipe Calderón Hinojosa.

Por ello, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, pidió ayer al senador Armenta, en la Mañanera, que mejor ya no denunciara a la ministra, pues era hacer el caldo gordo a la oposición.

“Yo le aconsejaría, con todo respeto, ¿no?, que no presentara ninguna denuncia, porque la va a convertir en mártir. Si para todo el bloque conservador y sectores muy desinformados, manipulados de la clase media, es una heroína la presidenta de la Corte, y todos los que cometen ilícitos o están siendo investigados por corrupción se sienten perseguidos, mi opinión es que no proceda”.

Y así sucedió, por la tarde: Alejandro Armenta Mier dijo que no denunciará a la ministra presidente.