Editorial de Peninsular Punto Medio

A pocos días de que todas las “corcholatas” renuncien o pidan licencia para ir por la candidatura presidencial del Morena, el que está tomando impulso es Marcelo Ebrard Casaubón, precisamente por haber renunciado desde el lunes y porque plantea propuestas para financiar los recorridos un día sí y al otro también.

Ayer, el excanciller formuló tres puntos clave para garantizar la transparencia de los recursos y evitar el uso de fondos públicos, empresariales o aquellos provenientes de actividades ilícitas:

1. Que Morena otorgue a cada aspirante una cuenta bancaria para recibir aportaciones de militantes y simpatizantes que no excedan los 5 mil pesos por donante, toda vez que se trata de un proceso interno para una posición de carácter partidista y no de campaña ni precampaña.

2. Al tratarse de una cuenta otorgada por el partido, se legitiman los recursos, con el consentimiento de quienes deseen apoyar estas actividades de manera voluntaria y conforme a la Ley General de los Partidos Políticos vigente.

3. Cada aspirante se compromete a ajustarse a los montos donados y a llevar a cabo el proceso más austero del que se tenga registro, ya que se priorizarán las actividades en territorio y el contacto directo con la gente.

Claro, si todo se acepta, don Marcelo podrá presumir en todo el país que la contienda interna se realiza con sus reglas, tal como ya presume que las renuncias se están dando porque así lo sugirió para que haya piso parejo entre los contendientes.

Por lo pronto, creemos, el excanciller va tomando ventaja, pues está solo en la pista, pero ya veremos desde hoy viernes 16, cuando ya todos estén en la zona de despegue.