Editorial de Peninsular Punto Medio

La movilización de las centrales obreras y de los patrones a nivel nacional sobre la reforma a la Ley del Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores mereció una respuesta de la presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, emitida ayer en la conferencia La Mañanera del Pueblo.

Allí, la mandataria mexicana precisó que el objetivo de la reforma a la Ley del Infonavit es erradicar la corrupción, asegurar que el uso de recursos de los trabajadores sea transparente y generar un esquema en el que también participen los desarrolladores privados, con el fin de garantizar la construcción de vivienda social. “Lo que estamos planteando con la reforma es un cambio en la estructura del Infonavit, que sea transparente, que los trabajadores tengan la certeza de que están bien cuidados sus ahorros, que haya absoluta transparencia en la asignación de viviendas, en la asignación de créditos”.

Explicó que la reforma plantea que el Infonavit no solo sea un fondo de ahorro que distribuya los recursos a desarrolladores inmobiliarios, sino que pueda construir vivienda de interés social y cumpla con su objetivo central: otorgar el derecho a la vivienda a las y los trabajadores mexicanos.

Por su parte, el director general del Infonavit, Octavio Romero Oropeza, informó que la reforma plantea equiparar la gobernabilidad de esta dependencia con la del Instituto Mexicano del Seguro Social (Imss), manteniendo el sello tripartito, que se compone del sector gobierno; sector trabajadores y sector empresarial. “Con la reforma no solo va a existir una responsabilidad directa, trazable y transparente en el manejo de los recursos, sino que permitirá, como hoy no sucede, la fiscalización por parte de la Auditoría Superior de la Federación”, mencionó.