El renovado Tratado de Libre Comercio abre oportunidades para afianzar la relación económica con Estados Unidos
Este 4 de julio se conmemora el aniversario 246 de la independencia de Estados Unidos, vecino país con el que, desde tiempos anteriores al auge del henequén, ha sido el principal cliente de las mercancías producidas en Yucatán, tal y como lo sigue siendo en la actualidad, cuando más de un 80 por ciento de nuestras exportaciones (que, de acuerdo con el Inegi, en 2021 fueron del orden de los mil 161 millones de dólares) tiene como destino esa nación.
Alejandro Guerrero Lozano, presidente de la Asociación de Maquiladoras de Exportación de Yucatán (Index), recordó aquella frase de que, si a Estados Unidos le va bien, a nuestra economía también.
De acuerdo al artículo “Situación actual del mercado de los principales rubros de exportación del Estado de Yucatán”, publicado en 2010, en la Revista de la Universidad Autónoma de Yucatán (Uady), las principales mercancías yucatecas exportadas en la primera mitad del siglo XIX eran palo de tinte, extracto de palo de tinte, maderas de construcción, cueros de ganado vacuno y de venado, sebo, tabaco y sombreros.
En esos tiempos en los que el estado de Yucatán abarcaba toda la Península, el tráfico exterior se hacía desde Sisal y Campeche, con los puertos de La Habana, Belice, así como Nueva Orleans, Nueva York, Boston y Malibú, en Estados Unidos, además de otros destinos en Europa.
Desde 1835 el henequén en rama ya tenía cierta demanda en Estados Unidos para la fabricación de jarcias y cordeles y competía en calidad y precio con el cáñamo de Rusia. Así es que a partir de la exportación de la fibra, que se convirtió en el principal producto yucateco, se aprovechaba para enviar a Nueva York azúcar, cereales, miel, piel de venado y cuero de res al pelo y chicle. A Nueva Orleans se mandaban sombreros de paja, cigarros de papel y de hoja de maíz, hilo de henequén, costales y sabucanes.
Con el paso de los años, la pérdida influencia de la producción henequenera fue total, y esta situación hizo que tomaran impulso otras actividades como las industrias apícola y salinera, el procesamiento de jugo de naranja y cítricos, y la captura de especies marinas de gran demanda en el mercado exterior. En tiempos recientes, las exportaciones al mercado estadounidense van encaminadas a las industrias textil, joyera, automotriz, aeronáutica y electromagnética.
Pero en estos tiempos complejos en los que a nivel mundial se tienen altos niveles inflación, derivado en gran parte medida del conflicto bélico entre Rusia y Ucrania, existe una crisis de proveeduría y aumento en el tiempo de entrega de materias primas que han aumentado los costos.
En ese contexto especialistas advierten que en dos años existe la posibilidad de que se presente una crisis que afecte a Estados Unidos y, por ende, a nuestra economía.
Así lo indicó Guerrero Lozano, quien recalcó que por el momento la demanda de mercancías para exportar sigue fuerte. De acuerdo con las proyecciones de la Secretaría de Fomento Económico y Trabajo del Gobierno del Estado (Sefoet), debido a que son muchas las empresas que se vienen a instalar en Yucatán, en tres años el número de contenedores que anualmente salen del Puerto de Altura de Progreso llegará a ser de 300 mil, cuando en la actualidad es de 160 mil y hace una década, 70 mil.
Al respecto, el presidente de Index Yucatán recordó que el año pasado el sector enfrentó serios problemas por la llamada “crisis de contenedores”, pues debido a la pandemia que obligó a reducir las actividades en China, la producción se desplomó y bajó el número que se enviaban a América
“No solo aumentaron de precio, sino además de que no había, ya no era como antes que se solicitaba con dos días de anticipación, sino que los estaban mandando tres o cuatro semanas después, lo que nos afectó a todos”, dijo el dirigente, quien recordó que los materiales que escasearon fueron el algodón, los fertilizantes y el metal.
Para solucionar este problema, el titular de la Sefoet, Ernesto Herrera Novelo, destacó que entre el paquete de inversiones que recientemente anunció el gobernador Mauricio Vila Dosal, se encuentra una fábrica de contenedores que estará ubicada en el municipio de Tetiz y que será una inversión con capitales de México y Estados Unidos.
Esta es una muestra de cómo también el país de las barras y las estrellas juega un papel preponderante en el desarrollo actual de la economía yucateca y la generación de empleos, ya que cada vez son más las empresas principal de capital norteamericano, como Tesla, Amazon y Walmart, que llegan a establecerse a Yucatán, motivadas por las ventajas competitivas que ofrece, tanto por la seguridad, certeza jurídica, aunado a proyecciones de crecimiento de oferta industrial para albergar nuevos proyectos.
De acuerdo con datos de la Sefoet, Estados Unidos realizó inversiones en Yucatán por un monto de 875 millones de dólares, cifra muy superior a los 19.3 millones de dólares que invirtió España y a los 8.4 millones de dólares que para ese fin aportó Canadá.
Y en este sentido vale la pena destacar que tan solo en los tres primeros meses de este 2022, de manera general, han llegado a Yucatán 128.5 millones de dólares de inversión extranjera directa, lo que, de acuerdo a la Secretaría de Economía, es el segundo valor más alto para un primer trimestre desde que se tiene registro, pues representa un aumento del 126 por ciento respecto al mismo periodo en 2021.
Y al efectuar un análisis sobre las expectativas que comercialmente tiene nuestro país con Estados Unidos, en estos tiempos en los que se espera una recesión a nivel mundial, el director de Asuntos Públicos de Estrategia Total, Daniel Rosado Méndez, consideró que tener un tratado de libre comercio renovado que da certidumbre, abre grandes oportunidades para afianzar esta relación económica.
“Uno de los principales temas de la agenda global tiene que ver con la manera en la que se pueden acercar los suministros de las cadenas de valor y cómo podemos hacer que en México se produzcan más insumos, ante una reducción como la que vivimos en los últimos años”, manifestó el especialista, quien fue entrevistado en el marco de su participación en el 11 Foro Imef Yucatán.
“México tiene un área de oportunidad importante para esta relocalización de insumos para las cadenas de manufactura globales y hasta llevar la producción de insumos a países que son aliados geopolíticos estratégicos”, apuntó.
Texto: Manuel Pool
Fotos: Agencias