El ejército chileno llevó el sábado varias tanquetas al centro de Santiago Chile para contener las protestas ciudadanas, que nacieron contra el alza del precio del metro de la capital pero que se han extendido por el país acogiendo un descontento general por la carestía y la desigualdad. La avenidas que llegan a la céntrica Plaza Italia de Santiago de Chile se encuentran cortadas por tanquetas del Ejército, que recurrieron a este método para tratar de repeler las protestas y enfrentamientos que se estaban produciendo.
Se trata del primer día de protesta ciudadana bajo el estado de emergencia que decretó el Gobierno como medida de contención de los disturbios violentos en que derivaron las manifestaciones contra el alza del precio del metro de Santiago. Esta subida de precio prendió la mecha del descontento general de una parte de la sociedad chilena por la desigualdad registrada en el país.
En la capital, las autoridades han reportado de momento cinco autobuses urbanos quemados y una estación de metro en llamas.Ante este hecho, la empresa de autobuses urbanos de la capital chilena, el Transantiago, determinó suspender temporalmente todas las operaciones de superficie por no contar con condiciones de seguridad para conductores y usuarios. Esta medida se suma al cierre de toda las líneas del metro decretada el viernes, después de que 41 estaciones fuesen quemadas o siniestradas. En varias comunas de la capital se puede escuchar el ruido de ollas a manera de protesta, mientras decenas de conductores hacen sonar las bocinas de sus autos a su paso por calles y avenidas de la ciudad.
Después de que el presidente Sebastián Piñera decretara el estado de emergencia, los militares se desplegaron en varias zonas de la capital, que amaneció tranquila tras los graves incidentes del viernes, en los que grupos violentos protagonizaron barricadas, saqueos en comercios y la quema y destrozo de varias estaciones de metro, autobuses y mobiliario urbano.
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