El 68 % de las empresas cierran a falta de un testamento

En este mes del testamento, el notario público número 25 del Estado Bernardo Rivadeneyra Pérez, recuerda la importancia de contar con un testamento para evitar problemas familiares al momento de fallecer y más en el ámbito empresarial.

“Los conflictos de intereses que surgen cuando muere el propietario que no deja testamento, es la causa de la desaparición del 67 o 68 de las compañías, pero existen dos figuras que nos ayudan a evitarlos: los testamentos o los fideicomisos sucesorios, los cuales dan certeza en la transmisión de los bienes”, indicó el también presidente de la Comisión Jurídica de Gobierno Corporativo del Consejo Coordinador Empresarial (CCE) en México, Bernardo Rivadeneyra Pérez.

En el marco de la presentación del Programa Empresas Familiares: Institucionalización, Gestión y Sucesión, con el que la Secretaría de Fomento Económico y Trabajo, Sefoet, busca precisamente fomentar la continuidad de empresas familiares yucatecas, aunque desaparezcan sus fundadores, su titular Ernesto Herrera Novelo comentó:

“Es importante que el gobierno corporativo pueda llegar a las empresas familiares que en la actualidad son el 90 por ciento de todas las empresas en México, y representan un porcentaje altísimo de nuestra economía, en algunos estados hasta un 95 por ciento, por lo que con ayuda de expertos se pueda aterrizar a medianas empresas el conocimiento de cómo trascender a través de las siguientes generaciones y que no desaparezca el negocio”, explicó.

 

 

Con este programa de capacitación dirigido a micro, pequeñas y medianas empresas (Mipymes) yucatecas, se busca que ante el fallecimiento del fundador o emprendedor del negocio, los pleitos entre los sucesores no termine por acabarlo y esto se puede lograr con una sucesión bien planeada en la que se pueda estipular quién será el titular de la marca, quien será el director general, o que las decisiones en la empresa se tomen de manera colegiada por los accionistas.

A su vez, el subsecretario de Inversión, Desarrollo Económico y Financiamiento de la Sefoet, Gerardo Díaz de Zavala, explicó que, de acuerdo con la Encuesta de Empresas Familiares 2021 de PwC México, en 45 por ciento de ellas, la mayoría de sus accionistas pertenece a la segunda generación y se espera que, en un lustro, alcancen 48 y sigan enfrentando el reto de llegar o superar a la tercera.

En el programa que está a cargo de la dirección de fortalecimiento de la Sefoet, se abordarán a lo largo de cinco módulos temas como la institucionalización, el gobierno corporativo y familiar, el entorno legal, la gestión, la profesionalización y manejo de conflictos, y la sucesión. Cada jueves del 29 de septiembre al 27 de octubre de este año, se llevará a cabo un módulo a las 10:00 horas, en la plataforma Zoom; las personas interesadas pueden inscribirse a través del enlace http://bit.ly/3CQJGfd, sin costo, pero con cupo limitado.

 

 

Además del abogado Rivadeneyra Pérez, participarán como ponentes el Decano de PwC México, Juan Manuel Ferrón Solís, y el socio de PwC México, Juan Carlos Simón Baqueiro.

Ferron Solis destacó que los conceptos de gobernanza e institucionalización son trascendentales para esta categoría de negocios, ya que, si no los aplican, cada 40 o 45 años pueden desaparecer o perder su capacidad productiva, valor agregado y fuentes de trabajo, lo cual termina afectando a la economía.

“Según los estudios que la PwC hizo con el IMEF en México y la Universidad de las Américas en Puebla, el 67 por ciento de las empresas familiares muere en la sucesión del padre a los hijos y sólo el siete por ciento sobrevive el paso de los hijos a la siguiente generación, siendo este un índice muy malo”, advirtió.

 

 

Texto: Manuel Pool

Fotos: cortesía