El guía espiritual maya Tiburcio Can May aseguró que el encendido del Fuego Sagrado del Año Nuevo Maya debe ser un punto de partida para renacer en el espíritu de nuestros antepasados, quienes fueron hombres enfocados en el misticismo y el desarrollo intelectual, antes que en hacer la guerra.
Explicó que celebra el Año Nuevo Maya cada día 25 de julio, pues ese día, pero del 1562, el fraile Fray Diego de Landa realizó el Acto de Fe de Maní, en el que quemó documentos, códices y mató a decenas de hombres y mujeres mayas.
“El acto de Fray Diego de Landa significó un nuevo amanecer, una buena vida para los mayas que sobrevivieron, es como un Año Nuevo”, sentenció.
El encendido de Fuego Sagrado será a las 6 de la tarde en el parque arqueológico de Yucalpetén (atrás de la central de abastos), en el poniente de Mérida, mañana jueves 25 de julio.
“Este nuevo encendido del Fuego Sagrado nos va a influenciar mucho en lo espiritual, vamos a abrir las conciencias para cuidar la madre naturaleza y el agua, que es parte de nuestra vida. Si seguimos contaminando nos vamos a matar nosotros mismos”, dijo.
Tenemos que olvidarnos un poco del orgullo, la soberbia, la vanidad, lo que nos hace actuar mal para con nuestros semejantes y con la naturaleza.
Dijo que actualmente estamos viviendo el Año de la Lluvia, esa agua que nos llega del cielo y que nos debe refrescar nuestra memoria y nuestra vida.
Con experiencia de más de 20 años como J´men, don Tiburcio dijo que ya ha participado en ceremonias de Fuego Nuevo o Sagrado en Alemania, Estados Unidos e Italia, aunque ha llevado la voz de los mayas a varios países.
Por su parte, Angélica Santiago Olvera, maestra de danza mexica con reconocimiento de la Unesco, dijo que por primera vez van a juntar la danza maya con la mexica, en el marco del Fuego Sagrado, por lo que invitó a los meridanos a no perderse el espectáculo.
“Ha llegado del día de la salida del sol, esa misma que un día nos pronosticó el emperador Cuauhtémoc”, afirmó.
Por otro lado, también se quejaron que este tipo de ceremonias no se pueda hacer en los grandes centros ceremoniales mayas, como Chichén Itzá y Uxmal, pues las autoridades siguen su dar permiso, pese a que lo único que hacen es promover la cultura maya.
Texto y foto: Esteban Cruz Obando