En la misa para conmemorar el aniversario 483 de la fundación de la ciudad de Mérida, el arzobispo de Yucatán, monseñor Gustavo Rodríguez Vega, declaró que en 17 años será una fecha histórica porque se cumplirán 500 años, pero es importante atender los problemas de su crecimiento desordenado y la reforestación.
En la ceremonia, en el que estuvieron la presidenta municipal Cecilia Patrón Laviada; el subsecretario de Asuntos Religiosos, Jorge Carlos Berlín Montero, en representación del gobernador del Estado, Joaquín Díaz Mena; la directora de Identidad y Cultura, Karla Berrón Cámara, y la presidenta del Patronato para la preservación del Centro Histórico, Zacil Canto, resaltó que el notorio aumento de gente que viene a vivir a Yucatán habla de que es una ciudad segura y hospitalaria, pero que se requieren medidas porque esto puede ocasionar problemas.
Mérida es una ciudad con alta migración, pero esto propicia un aumento en el precio de la renta y ventas de casas. No sólo vienen a vivir personas de otros estados, sino hasta de otros países.
Agregó que Mérida poco a poco se convierte en un lugar cosmopolita, y esto llena de orgullo, pero por otra parte esto implica reforzar la seguridad, por tal motivo, hace tres años la Iglesia y empresarios, con metodología jesuita, trabaja con diferentes sectores para fortalecer el tejido social. “Cuando hay población creciente y de tantos lugares hay un continuo riesgo. Han estado en lugares de focos rojos para la construcción de la paz. Cada uno tiene su responsabilidad, los yucatecos tienen que abrirse a las demás personas, respetando su manera de pensar, y sus culturas para enriquecernos”, aseveró.
Mencionó que también está el caso de los migrantes y a estos hay que atender como hermanos.
Dijo que hay riesgos de la deforestación, de la contaminación, riesgos ambientales, sociales, pero también ideológicos, el apóstol San Juan señalaba que existían falsos profetas.
“Llamaba la atención a los cristianos a que no se dejen influir por las corrientes ideológicas. De pasar de una ciudad que casi todo el mundo pensaba más o menos igual, pero la ciudad cosmopolita ha traído muchos falsos profetas, de minorías que quieren imponerse en toda la población”, aseveró.
Resaltó el poder que tienen que han llegado a los medios educativos para influir en los pequeños y jóvenes en las ideologías actuales, contrario a los valores cristianos que seguir promoviendo, lo nuestro no es una moda es el Evangelio siempre nuevo, siempre actual.
Expresó que el Evangelio trae el inicio del ministerio del Señor Jesucristo, precisamente cuando Juan “el Bautista” es llevado a la cárcel, es entonces cuando Jesús sale de Nazaret y se mantiene en ambientes exteriores judaísmo, quería mostrar la inclusión y apertura a todos los pueblos.
Texto y foto: Darwin Ail