Varios analistas pronostican que la moneda europea caerá por debajo del billete verde, algo que no se ve desde diciembre de 2002
El euro alcanzó ayer, durante un breve momento, la paridad con el dólar por primera vez en dos décadas, lastrado por la amenaza de un corte de suministro de gas ruso en la Unión Europea.
Los inversores privilegiaban el billete verde, que ha ganado casi 14% desde principios de año y que cotizó brevemente a un dólar por un euro, su nivel más alto desde diciembre de 2002.
Hacia las 14:40 horas, la moneda única europea se estabilizó frente al billete verde, a 1.0050 dólares, en alza de 0.10%.
El respiro para el euro podría ser de corta duración. Varios analistas pronostican que el euro caerá por debajo de un dólar, algo que no se ve desde diciembre de 2002.
El mercado teme un empeoramiento de la crisis energética en Europa por la interrupción del suministro de gas ruso que llega por el gasoducto Nord Stream 1, actualmente en mantenimiento. Esta situación atiza los temores de que haya una recesión en Europa.
El gas proveniente de Rusia está en el “centro de la tormenta en Europa” y el anuncio del sábado de que Canadá devolverá a Alemania turbinas para paliar la crisis energética con Rusia “no tuvo un impacto positivo”, señaló el analista Jeffrey Halley, de la firma Oanda.
El gigante ruso Gazprom inició el lunes obras de mantenimiento en el gasoducto Nord Stream 1, que transporta el gas directamente desde Rusia hasta Alemania. Los países europeos están a la expectativa de saber si Moscú restituirá el suministro tras las obras, previstas durante 10 días.
“El tema clave es saber si el gas volverá después del 21 de julio. Los mercados parecen haber tomado ya una decisión”, señaló Halley.
Para Mark Haefele, experto de UBS, una suspensión del suministro de gas ruso en Europa “provocaría una recesión en toda la zona euro con tres trimestres consecutivos de contracción de la economía”.
El Banco Central Europeo (BCE) entonces podría verse en dificultades si quiere terminar con su política monetaria expansiva y pasar a una fase contractiva para luchar contra la inflación galopante que agrava la situación.
Por su parte, el emisor del dólar, la Reserva Federal, tiene más margen de maniobra para seguir subiendo las tasas, ya que las cifras de empleo publicadas el viernes probaron que la economía estadounidense presenta una mayor resiliencia por ahora.
Los datos sobre la inflación en Alemania, Francia y Eu podrían alimentar la preocupación de los inversores.
“Si la inflación en EU es más fuerte de lo que el mercado espera, podría beneficiar al dólar”, ya que los inversores apuestan por que la Fed vaya más rápido, dijo Fawad Razaqzada, analista de Forex.com.
Texto y foto: Agencias