Hace ya varios años era costumbre de las familias viajaran en tren para visitar a los Reyes de Oriente
Tizimín está de fiesta y hasta hace unos años en estos días era costumbre de las familias viajar en ferrocarril para visitar a los Reyes Magos de Oriente. La salida era al amanecer y en el recorrido no faltaban las venteras de salbutes, panuchos, refrescos y mucho más.
En las redes sociales tuvimos la oportunidad de ver un video en el que el maestro Luis Pérez Salazar recibe, en el Salón de Arte e Historia de la Ciudad de Reyes, a un grupo de turistas de Barcelona, España, a quienes relata que fue el domingo 30 de noviembre de 2013 cuando llegó por primera vez el tren a Tizimín, ocasión que, como usted se imaginará, fue toda una fiesta popular.
Ese día propiamente se inauguró el ramal Espita-Tizimín, y desde la vecina villa llegó su orquesta para amenizar la ocasión desde las cinco de la mañana, alternando con una banda militar tocando dianas y otras piezas propias para aquel día histórico, de acuerdo con un programa de actividades que se conserva aún en el salón de Arte e Historia.
También existe una invitación del Consejo de la Administración de los Ferrocarriles Unidos de Yucatán para dicho evento y que se encuentra firmada por Joaquín Peón, Avelino Montes y Augusto Cámara, entre otros, y en ella se indica que el Tren que en el primer viaje transportó a invitados, salió a las seis de la mañana de la estación Mérida Oriente en San Cristóbal.
Fue al mediodía cuando llegaron por primera vez a la estación que era de madera y laminas de zinc, las locomotoras “Tizimín” y “26” que jalaban seis vagones “Pullman”, que hicieron un recorrido por poblaciones como Cholul, Conkal, Nolo, Tixkokob, Muxupip, Motul, Cansahcab, Temax, Quintana Roo (municipio de Yucatán), Tunkás, Dzitas, Espita, y Calotmul.
Sin duda la llegada de los ferrocarriles a Tizimín marcó una etapa histórica en nuestro municipio que no hay que olvidar, pues marca el inicio del desarrollo económico de Tizimín, al contar con una vía de comunicación con la capital del estado y facilitar el transporte de carga y pasajeros. Se transportaban innumerables productos para su comercialización como la madera, el maíz, y la leña, sal, y mercancías.
El transporte de pasajeros a Tizimín desde la ciudad de Mérida, abrió la oportunidad de tener mayor número de visitantes a la región, sobre todo en estos días de la fiesta anual en que llegaban un número muy elevado de peregrinos.
El maestro Pérez Salazar destaca que fue hasta mayo de 1946 cuando el presidente Miguel Alemán inauguró la segunda estación que en la actualidad alberga hoy a conocido supermercado.
El maestro recuerda que el Tren llegaba de Mérida a las 11:30 y puntual iniciaba su retorno a la una de la tarde, llevando además de pasajeros furgones de maíz y ganado.
Y de aquellos largos recorridos, en los que los viajeros terminaban llenos de tizne porque las máquinas eran de vapor, quedan en la memoria del cronista de la ciudad de Reyes, como era la ocasión propicia para probar empanadas y codzitos acompañados del Champagne de Yucatán, que es la manera en la que se le conocía a la Sidra Pino.
Y qué decir de las arepitas de almidón que se vendían en la estación de Calotmul y el chicle blanco y dulces que se ofrecían en las diversas estaciones.
Texto: Manuel Pool Moguel
Fotos: Cortesía