El honorable Congreso de Llucatam

Por Sergio Aguilar

La siguiente es la lista de diputadas y diputados del congreso local que no temieron en endeudar a Yucatán por años en un paranoico estado policíaco por más de 2 mil millones de pesos. Podrá Yucatán ser uno de los estados más seguros del país de acuerdo a ciertos indicadores, pero también es uno de los estados con mayor desigualdad, pobreza, tasa de suicidios y alcoholismo, aunque veamos que esto no es de prioridad en el Congreso.

Dejo esta lista acá, esperando sepamos recordarla cuando regresen los próximos años pidiendo votos para ellos o sus candidatos.

Paulina Aurora Viana Gómez, PAN.
Victor Merari Sánchez Roca, PAN.
Miguel Edmundo Candila Noh, Morena.
María de los Milagros Romero Bastarrachea, Movimiento Ciudadano.
Manuel Armando Díaz Suárez, PAN.
Marcos Nicolás Rodríguez Ruz, PRI.
Felipe Cervera Hernández, PRI.
Martín Enrique Castillo Cruz, PRI.
Lila Rosa Frías Castillo, PRI.
Mirthea del Rosario Arjona Martín, PRI.
María Teresa Moisés Escalante, PRI.
Lizzete Janice Escobedo Salazar, PRI.
Luis Enrique Borjas Romero, PRI.
Karla Reyna Franco Blanco, PRI.
Warnel May Escobar, PRI.
Luis Hermelindo Loeza Pacheco, Morena.
Miguel Esteban Rodríguez Baqueiro, PAN .
Kathia María Bolio Pinelo, PAN.
Luis María Aguilar Castillo, Nueva Alianza.
Harry Gerardo Rodríguez Botello Fierro, PVEM.
Mario Alejandro Cuevas Mena, PRD.
Rosa Adriana Díaz Lizama, PAN.
Silvia América López Escoffié, Movimiento Ciudadano.
Fátima del Rosario Perera Salazar, Morena.

También vale recordar que, cobardemente, el presidente del congreso, Felipe Cervera, de nuevo tomó la atribución de obligar a un voto secreto la modificación de la Constitución Política para aprobar el matrimonio igualitario. En palabras del comunicado de prensa de la página web del congreso, con esto “se declaró asunto concluido”. Es difícil no preguntarse por qué sólo las diputadas de Movimiento Ciudadano, Silvia López Escoffié y Milagros Romero Bastarrachea se pronunciaron a favor de una votación pública y abierta a la ciudadanía que los eligió. Es difícil entender por qué de los 9 votos a favor no hubo 9 pronunciamientos públicos.

En general, es difícil de entender por qué alguien estaría orgulloso de esta legislación homofóbica, que raya en la ilegalidad, que no teme endeudar la cuenta pública estatal para poner cámaras de seguridad que sólo fomentan la paranoia. Es difícil entender por qué alguien estaría orgulloso de vivir aquí, el estado del panucho, de la violencia intrafamiliar, de la desigualdad económica tan siniestra, de las denuncias de tortura de la policía, de la enorme obesidad infantil, de la contribución tan cínica al calentamiento global, de la nula planeación urbana, de la mochez religiosa católica ridícula y los moches corruptos en los partidos políticos, del exgobernador mago que logró desaparecer 9 mil millones de pesos y que no está siendo investigado.

En fin, es difícil entender por qué no nos independizamos ya, de una vez, y creamos nuestra república bananera propia, la república del panuchito, la república del agachado, de la violencia contra las mujeres, de la xenofobia y el racismo. La república del siempre leal y jodido estado de Llucatam.

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