El Museo del Ferrocarril, un viaje al pasado que vale la pena vivir

Desde que uno entra al local del Museo del Ferrocarril la mente vuela al pasado, por lo menos a siglo y medio, cuando los trenes se convirtieron en parte importante de la revolución industrial del mundo y de México.

Los meridianos tenemos a pocos pasos del Centro Histórico el Museo del Ferrocarril, en donde podemos recrear lo que significó ese transporte en el estado, desde que lo introdujo el empresario José Rendón Peniche.

Una visita al Museo del Ferrocarril de Yucatán es nuestra recomendación para su Paseo Dominical, ya que es un lugar ubicado en Mérida, en uno de los extremos de La Plancha o la Estación Central.

Desde que se fundó hace 17 años ha visto desfilar a cientos de yucatecos y extranjeros que buscan pasar un día diferente en la propia capital yucateca.

Consta de 43 piezas de trenes, entre vagones y locomotoras, incluida una de Vapor 270, construida en Estados Unidos en 1903 y que aparece en las películas de indios y trenes en el cine del oeste de Estados Unidos.

–Esta es nuestra joya en locomotoras, pues es de 1903 y construida en Filadelfia, Estados Unidos– explicó Flavio Baak Bacelis, quien la hizo de guía de turista en la visita de Punto Medio.

Además hay otras locomotoras, como La Vaca, blanca, que era tan poderosa en su tiempo que llegaba a jalar hasta 50 vagones de carga o pasaje.

A La Vaca, entre 2009 y 2011 que estuvo cerrado el museo, le robaron piezas de su motor, presumiblemente para usarlo como repuesto en otras locomotoras. De los causantes de este ataque a la historia, nadie sabe nada.

Otra joya del Museo del Ferrocarril lo constituye el vagón Rendón Peniche, de 1890, que es un coche para tren completamente de madera, en donde solo las ruedas y las muelas de enganche era de metal.

El Rendón Peniche, nos cuenta el guía, fue un carro de lujo de los Ferrocarriles Unidos de Yucatán, y que sólo utilizaban altos directivos y gobernadores, tanto que uno de sus dueños fue el mandatario Felipe Carrillo Puerto.

–No se sabe si lo usó, pero sí que fue de él, pues en los registros de los dueños del carro Rendón Peniche aparece el nombre de Felipe Carrillo Puerto— explicó Baak Bacelis.

Actualmente el vagón o coche Rendón Peniche está semi destruido por el paso del tiempo y porque, al ser de madera, los daños fueron mayores cuando se descarriló hace muchos años.

Fue utilizado en las películas “Peregrina” y “Guerra de Castas”, por lo que es un atractivo especial en el museo.

Parte de su equipamiento y utensilios que hablan de sus lujos se exhiben en el propio museo, en otro de los vagones.

Texto: Esteban Cruz Obando

Fotos: Luis Payán

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