El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, celebró ayer que el tipo de cambio haya bajado de 17 pesos por dólar por primera vez desde 2015 durante esta jornada.
“Esto no pasaba en décadas”, presumió el mandatario durante su rueda de prensa matutina. “Estoy muy contento, eso sí”, agregó.
López Obrador se refirió así a la apreciación que ha tenido la moneda mexicana que el miércoles se ubicó en los 16.99 pesos por dólar en la apertura del mercado.
El peso mexicano ha tenido una apreciación histórica de más del 12 % en la primera mitad del año después de superar las 24 unidades por billete estadounidense en el segundo trimestre de 2020, el momento más álgido de la pandemia por covid-19.
El gobernante aseguró que este valor del peso sobre el dólar tiene efectos positivos. “Algo que es importante, que nos ayuda es que tenemos un porcentaje de la deuda pública contratada en dólares, entonces al fortalecerse el peso nos baja la deuda”, aseveró.
Asimismo, destacó que en otros sexenios hubo fuertes devaluaciones, como en el de Miguel de la Madrid (1982-1988), cuando se depreció en 2,454 %.
Presumió de que su gestión ha provocado la fortaleza de la divisa mexicana, contrario a lo que los expertos indican porque “dicen que son efectos externos”.
Al defender su política económica nacionalista, recordó la forma en la que antes se justificaban las privatizaciones, cuando se señalaba que eran un beneficio del país, pero en realidad solo un grupo selecto obtenía estas ventajas.
“Investiguen cómo justificaban las privatizaciones, era de que iban a obtener financiamiento, que se iban a fortalecer las finanzas públicas, que iban a tener más presupuesto, más dinero y fue cuando hubo más desigualdad, unos cuantos mucho mucho mucho muy ricos y millones de pobres”, afirmó.
Por eso, dijo, él llama al expresidente Carlos Salinas de Gortari (1988-1994) “el padre de la desigualdad moderna”, ya que durante su sexenio pasó de haber un multimillonario en México a 24 en total.
Texto y foto: Efe