El problema de La Casa de Papel

Didier Ucán Canto
didierucan1@gmail.com

La serie española La Casa de Papel ha gozado de un éxito a nivel Hispanoamérica de manera bestial, más allá de su guion conveniente para la trama y una serie de características que no terminan de enganchar como trabajo redondo, los españoles han refrescado el interés en las series producidas en su país a partir de ésta.

El elenco es carismático y desborda una historia interesante pero que por ratos se ve manchada por un trabajo de guion no tan pulido, desde situaciones inverosímiles, dentro del universo que plantea, como giros de tuerca gastados.

Sin embargo, su cuarta temporada es de lo mejor trabajado que han presentado, aun así, flaquea por un punto muy importante: dependen del flashback. Teniendo dos temporadas sólidas para finalizar la historia decidieron alargar la serie dado su éxito, y más que parecer un acierto se convirtió en un reto a nivel de guion para poder encajar todas las piezas.

La cuarta temporada rebosa acción e intriga, pero pierde en el de interés e enriquecimiento de la historia porque cada vez que no pueden explicar algo recurren a un recuerdo, al pasado. Si bien es un recurso muy utilizado, abusar de él termina por demostrar lo que el público ya sabía… La historia estaba pensada para dos temporadas y nada más.

A pesar de estos fallos, quienes sean fieles seguidores de la serie saldrán con una visión neutra, una temporada que no termina de encantar pero que sostiene bien su esencia, los puntos de los que flaquea esta serie siempre fueron los mismos, historias de relleno que no llevan a nada, planteamientos de personajes que no son respetados y, sobre todo, falla en los momentos de tensión (aunque ésta última ha mejorado durante esta cuarta temporada).

A pesar de todo es entretenida y una buena forma de pasar el tiempo durante cuarentena.
¿Será la siguiente la última temporada?

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