El síndrome de Asperger es un padecimiento común en la consulta padiatrica del ISSSTE

En la actualidad, el síndrome de Asperger, es muy conocido por la población en general, ya que ha sido centro de la trama de películas y series de televisión, señaló la Dra. María Elena Pérez Escutia, jefe de Pediatría de la Clínica Hospital Mérida del Issste, ubicada en Susulá en esta Ciudad, en el marco del Día Internacional del Síndrome de Asperger que se celebra el 18 de febrero de cada año.

La pediatra dijo que el que se maneje el tema de la condición, ha servido para fomentar el diagnóstico temprano, lo cual es favorable para iniciar el tratamiento correspondiente y lograr una reinserción social exitosa.

“Definitivamente es un diagnóstico que toca a toda la familia, y hay que llevar un camino multidisciplinario para el diagnóstico y posteriormente para el tratamiento”.
Explicó que el Síndrome de Asperger es un trastorno del neurodesarrollo de origen genético, presente desde el nacimiento, que afecta varias áreas del desarrollo personal, como la comunicación e interacción social, pero no la inteligencia, los síntomas son evidentes en la primera infancia, desde el primer año, siendo más visibles entre los 3 y 6 años de edad, la base de los síntomas es la alteración en tres áreas del desarrollo neural, la comunicación verbal y no verbal, deficiente interacción social y escaso repertorio de intereses con gustos repetitivos. Con incidencia de 1-2 por cada 100 niños y es más frecuente en varones. Existen varios grados de afectación.

“Dentro de las características principales está el lenguaje que es peculiar, de inicio precoz, vocabulario elevado y extenso para su edad, discurso monótono, repetitivo, sin entonación, ni énfasis, extravagante, detallado en lo que centra su atención. Su discurso no se adapta a la situación, es inoportuno, incoherente, rebuscado, impertinente, los niños que padecen Asperger en ocasiones proyectan una imagen de sabe lo todos, no detectan el doble sentido, el sarcasmo, las bromas, todo es literal, son muy ingenuos, parece no prestar atención, no pueden llevar a cabo un dialogo, la plática va en un solo sentido dirigida a su interés. Una escasa cantidad de niños con este síndrome tienen un lenguaje normal o deteriorado lo que hace difícil el diagnóstico”.

Por último los pequeños presentan en ocasiones deficiencia severa en la interacción social, problemas para comunicarse, algunos se manifiestan mediante berrinches desproporcionados que llaman la atención de los padres, ya que tienen fijaciones, solo prestan atención a una cosa que les interese y no puedes separarlos de un juguete, pueden estar golpeándolo por horas sin poner atención a nada más que al sonido que hace el golpear su juguete, si se lo quitan inicia el llanto que puede tardar mucho tiempo.

“La ruta diagnóstica es visitar al pediatra si es detectado por los padres o maestros de escuela, el diagnóstico es puramente clínico y se basa en el comportamiento del paciente, se evalúan las posibilidades, se estudian los antecedentes familiares ya que generalmente el padre tiene el mismo síndrome y se envía al especialista que es el neuropediátra, quienes confirman el diagnóstico clínico y pueden aplicar pruebas para descartar asociaciones con otras patologías, ya que es frecuente, como el trastorno de déficit de atención y el trastorno obsesivo compulsivo”.

Una vez diagnosticado el síndrome de Asperger el neuropediátra descarta cualquier patología orgánica, enfocándose en el tratamiento cognitivo educando y haciendo notar sus diferencias, requiere valoración por el psiquiatra infantil, quien decidirá las pautas del tratamiento, el cual puede ser solo conductual, medicamentoso o mixto.
Para todo esto el medico de primer contacto debe estar preparado para que pueda identificar los síntomas en esta variación de la conducta. En la Clínica Hospital Mérida realizamos una campaña informativa para dar a conocer los diferentes síntomas y la ruta diagnóstica para no perder tiempo y se inicie el tratamiento lo antes posible.