Mérida, Yucatán; 27 de noviembre de 2019 (ACOM).- La edad promedio del consumo primerizo de alcohol en México bajó a los 10 años según la Comisión Nacional contra las Adicciones (Conadic) y Yucatán ocupa el primer puesto por intoxicación aguda alcohólica, de acuerdo al Boletín Epidemiológico de la Secretaría de Salud.
Estos datos fueron exhibidos durante la transmisión del programa semanal Primera Línea en Reporteros Hoy. El tema fue alcoholismo y participaron los psiquiatras especializados en adicciones Erick de la Cruz Acosta Espadas y Héctor Vázquez Segovia.
Los médicos señalaron la importancia de no generalizar el alcoholismo y distinguir la patología de los pacientes enfermos de dependencia alcohólica. Ambos concluyeron que cada caso precede a distintos orígenes psicosociales o psiquiátricos.
Eric Acosta indicó que es necesario conocer diversos criterios para determinar si alguien necesita un tratamiento por verdadera dependencia alcohólica o enfocarse a trastornos de atención, ansiedad y depresión.
Los especialistas explicaron que el consumo de alcohol comienza de forma experimental, después sobreviene el bebedor social y finalmente llega la etapa de la ingesta no controlada. A partir de esta circunstancia existe el riesgo de la introducción de drogas.
Durante la transmisión, los psiquiatras destacaron la importancia de atender al alcohólico desde un dictamen personal, es decir, a partir de los antecedentes del entorno familiar e historial clínico de salud mental.
Indicaron que los grupos de apoyo de Alcohólicos Anónimos sí son eficientes, pero ocurren casos donde no hay resultados positivos debido a que no es posible atender de manera generalizada el tratamiento a la adicción alcohólica.
Por otra parte, reconocieron que el consumo de alcohol y drogas sí modifica la química neural por lo cual cerebro no regresa a su estado original con la simple suspensión del consumo de enervantes.
En algunos casos las secuelas son irreversibles y de ahí la importancia a atender a un enfermo alcohólico con oportunidad, paciencia y coordinación del entorno allegado.
Finalmente reiteraron la importancia de hacer programas y actividades multidisciplinarias para educar a los ciudadanos respecto al problema.