Yucatán cuenta con una reserva nacional del agua, pero el Consejo Ciudadano por el Agua de Yucatán y la Coordinadora Nacional Agua para todos aclararon que se tiene la idea errónea de que el vital líquido es ilimitado, además de que está contaminado y cada vez se tienen que perforar pozos más profundos para extraer el recurso.
Al celebrarse el foro abierto Rumbo a la Ley General de Aguas que México Necesita y Encuentro hacia una Contraloría Social del Agua, la representante del citado consejo y coordinación, Teresa Vaught Charruf, indicó que para la protección del agua se forman contralorías, que son un proyecto del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt).
Detalló que la contraloría está formada por ambientalistas, comunidades indígenas, académicos y empresarios con ética para colaborar con las autoridades y revertir la crisis del agua, el “problema en Yucatán es que no vemos que estamos al borde de la crisis, participan en proyectos de saneamiento son soluciones y propuestas y también entretejiendo el conocimiento indígena ancestral”.
“No son proyectos desde el escritorio hay que integrar a las comunidades indígenas, respetar sus derechos, el derecho humano al agua se impulsa la iniciativa ciudadana una que garantice el derecho humano al agua, salud y pacífica de las comunidades y que empecemos a ver el problema a abordar con compromiso y responsabilidad”, expresó.
Explicó que los industriales están viniendo a Yucatán y deben exigirles que cumplan los requisitos, no hay que olvidar que se está en una emergencia planetaria hay que cambiar la forma que se consume, produce y trata a la población más vulnerable.
Señaló que actualmente tienen contralorías en el centro y norte del país, por lo que la ciudadanía debe organizarse para exigir a las autoridades y empresarios les piden empatía, ética y si van a instalar una megaindustria en un pueblo tienen que consultar al pueblo, en una crisis planetaria que recapaciten en el proyecto.
Asimismo, reveló que las granjas porcícolas no dan muchos empleos y son muy contaminantes.
Aunque las más de 500 fábricas de cerdos se estima que generan 36 mil puestos laborales de manera indirecta.
Pidió a los diputados que aprueben la Ley del Agua que México que llevan 12 años de omisión, y no la han aprobado en diez años, a nivel nacional hay problemas con el agua, la salud, la pobreza, desigualdad se piensa en un cambio, es una oportunidad para cambiar la forma de vida y atender a las comunidades.
La citada ley tiene por objeto regular la explotación, uso o aprovechamiento de dichas aguas, su distribución y control, así como la preservación de su cantidad y calidad para lograr su desarrollo integral sustentable.
México ya experimenta los efectos negativos de la falta de agua. Durante los últimos años, las regiones centro y norte del país han vivido escasez de agua debido al aumento de las sequías. De acuerdo con datos del Banco Mundial, en el país la disponibilidad promedio anual per cápita pasó de 10 mil metros cúbicos (m3) en 1960 a 4 mil en 2012. Se estima que para 2030, esta disponibilidad en México descienda debajo de los 3 mil m3 por habitante al año.
Por último, argumentó que actualmente cuentan con contraloría del agua en Mérida, Hunucmá y tienen varias comunidades que se quieren sumar, también académicos en una gobernanza todos tengan un papel de educación del agua.
En el foro, realizado en el Salón del Consejo de la Universidad Autónoma de Yucatán (Uady), inició con el mensaje de la coordinadora nacional Agua para Todxs, Agua para la Vida.
Luego antecedentes sobre la Ley General de Aguas impartido por Cuauhtémoc Jacobo Femat; presentación del Proyecto Tocoyani: hacia la construcción de la primera contraloría social autónoma del agua en Yucatán.
Texto y foto: Darwin Ail